Enfermero sentenciado a cadena perpetua por la muerte de dos pacientes y el intento de asesinato de otros seis en Múnich

Por: becquerel

16 mayo, 2023

Enfermero sentenciado a cadena perpetua por la muerte de dos pacientes y el intento de asesinato de otros seis en Múnich

El pasado martes, un enfermero identificado como Mario G., de 26 años de edad, fue sentenciado a cadena perpetua por la muerte de dos pacientes y el intento de asesinato de otros seis en un hospital en Múnich, al sur de Alemania, en el año 2020. Las autoridades descubrieron que el enfermero había inyectado sedantes a los pacientes para poder llevar a cabo su trabajo con mayor tranquilidad.

Según el testimonio del propio acusado, antes de trabajar en el hospital, solía tener una vida nocturna intensa y un consumo excesivo de alcohol, y aunque obtuvo un nuevo empleo en el centro médico, su estilo de vida anterior parecía no haber quedado atrás. Mario se enfurecía cuando los pacientes requerían atención y eran demasiado activos, por lo que apelaba a la administración de sedantes para mantenerlos tranquilos.

El caso llegó a la luz pública después de que el escritor Hans Magnus Enzensberger recibiera una sobredosis de sedantes, pero logró sobrevivir. Sin embargo, otros dos pacientes no corrieron con la misma suerte. Después del caso del escritor, un auxiliar de enfermería alertó a la dirección del hospital sobre el repentino empeoramiento de los pacientes. Los análisis de sangre revelaron que se les había administrado una sobredosis de medicamentos no recetados. Un médico investigó otros casos similares y descubrió que Mario había sido el enfermero de guardia en todos los casos.

Durante el juicio, Mario G. explicó que había administrado los sedantes para poder estar tranquilo y distraerse con su celular, ya que a menudo estaba ebrio o con malestar por haber bebido la noche anterior. También admitió que habría continuado con su comportamiento si no lo hubieran detenido.

Este no es el primer caso de asesinatos en hospitales en Alemania. En el año 2019, otro enfermero, Niels Högel, recibió una condena a cadena perpetua por el asesinato de al menos 85 pacientes en Baja Sajonia, en el noroeste del país. Los psiquiatras diagnosticaron a Högel con un trastorno de personalidad narcisista.