Gustavo Petro insta a reconocer labor de desminadores y proteger a víctimas de minas con estatutos especiales

Por: Elizabeth Montoya

2 mayo, 2024

En un evento realizado en la región de Montes de María, libre de sospechas de minas antipersonales, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, hizo un llamado al reconocimiento formal de la labor desempeñada por quienes se dedican a desactivar estos artefactos mortales, expresando la necesidad de establecer un Estatuto del Desminador que garantice condiciones laborales dignas y protección para aquellos que arriesgan sus vidas en esta tarea, así como un segundo estatuto para civiles afectados.

“Hay que hacer la tabla, la cantidad de personas dedicadas a eso, sus tiempos de servicios, etc. Debe haber un estatuto laboral especial por el alto riesgo de su profesión, una prima de riesgo que tiene impacto en la vida pensional, que en el Ejército se llama el ‘retiro’. Que esto quede como una tarea (del Ministerio de Defensa)”, sostuvo Petro, explicando que un porcentaje de desminadores ya no están en el Ejército.

En sus palabras, Petro destacó además la importancia de brindar apoyo a las víctimas civiles de las minas antipersonal, asegurando que el Estado debe proporcionarles asistencia integral que incluya ayuda para encontrar vivienda y oportunidades laborales.

“Aquí hay algunas que han sido afectadas, niños, mujeres, hombres, todas personas en general del trabajo agrario o rural, que cuando sucede un hecho de estos pierden completamente o parcialmente su capacidad laboral”, explicó, agregando que “las personas civiles que han sido afectadas por las minas (…) deben tener una ayuda del Estado”, enfatizó el presidente, subrayando la urgencia de crear mecanismos que mitiguen el impacto devastador de estos artefactos en la vida de los colombianos.
El presidente destacó que ambos grupos deben tener “lo mejor” del avance tecnológico en salud, prótesis, materiales, atención permanente, etc. “Esto tiene que ser una actividad prioritaria del Ministerio de Defensa para que puedan tener una vida mejor unos y otros”, señaló.

Persistencia de la amenaza

A pesar de los avances en la desactivación de minas en la región de Montes de María, Petro advirtió sobre la persistencia de amenazas por parte de grupos armados ilegales. Enfatizó que la presencia de estos actores del conflicto, como el Clan del Golfo, representa una seria amenaza para la seguridad y estabilidad de la población civil. “Las relaciones mafia-política no se han superado en la región”, señaló el mandatario, instando a enfrentar de manera contundente cualquier intento de resurgimiento de la violencia en la zona.

Como parte de su intervención, el presidente Petro compartió un análisis histórico del impacto de las minas antipersonal en Colombia, destacando que el año 2006 fue el más crítico en términos de incidentes reportados.

“2006 fue un año terrible para estas personas, casi la mitad personal militar y la otra mitad civiles. La inmensa mayoría han sido campesinos, y allí un porcentaje de niños y niñas que padecen hoy las consecuencias de estos hechos. La buena noticia es que la pirámide, a partir de 2006, empezó a tener menos y menos víctimas”, resaltó el mandatario, expresando su optimismo al observar una tendencia descendente en el número de casos desde entonces.
De los 1.224 casos registrados en 2006 a los 37 que van este año, Petro destacó su fe en que “para los años siguientes siga cayendo hasta que se vuelvan cero casos”, gracias a la labor del Batallón de Desminado y el compromiso de su Gobierno para erradicar por completo esta amenaza contra la vida y la seguridad de los colombianos.

En respuesta a la solicitud del presidente, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, expresó su compromiso con la protección de los desminadores y afirmó que se trabajará en la creación de un marco legal que reconozca y proteja su labor. “Es fundamental brindar seguridad y respaldo a aquellos que dedican sus vidas a desactivar minas y proteger a nuestras comunidades”, aseguró Velásquez, destacando la importancia estratégica de esta labor en la construcción de un país seguro y en paz.