Contraloría evidencia deficiencias en obra del Museo de la Memoria por $12.998 millones

Por: Ronny Orejarena

11 enero, 2024

Fachada Contraloría General de la República. Foto: Contraloria

La Contraloría General de la República realizó una auditoría a la construcción del Museo Nacional de la Memoria, proyecto a cargo del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), en la que halló severas irregularidades que ascienden a $12.998 millones.

En el informe presentado por el ente de control se detallan deficiencias en la planeación, falta de calidad en los procesos constructivos, incumplimiento de especificaciones técnicas, insuficiente supervisión y coordinación de los contratos, entre otros aspectos que evidencian posibles sobrecostos y desviación de recursos en la obra.

Uno de los principales hallazgos tiene que ver con debilidades en la etapa de planeación y en la ejecución de los procesos constructivos del Museo, cuyo contrato fue adjudicado en 2020 a la constructora española OHLA por parte de la Agencia Nacional Inmobiliaria (ANI).

Según la Contraloría, la suma de $12.998 millones corresponde a desembolsos realizados al contratista por concepto de equipos y obras parcialmente construidas o no recibidas a satisfacción, además de elementos de concreto que no cumplen con los estándares de resistencia exigidos y pagos duplicados.

La construcción del Museo Nacional de la Memoria, que debía entregarse en octubre de 2022, presenta retrasos considerables. Actualmente la obra es considerada un ‘elefante blanco’ en medio de una disputa contractual que involucra a la Agencia Nacional Inmobiliaria y la constructora OHLA.

El Ministerio Público solicitó una auditoría no solo para investigar posibles incumplimientos, sino debido a que este Museo representa una acción de reparación y reconocimiento a las víctimas del conflicto armado, según lo establecido en la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras.

El proyecto contemplaba la construcción del Museo en un lote ubicado entre la Avenida Calle 26 y la Carrera 29 en Bogotá. La edificación debía erigirse en un plazo de dos años, por lo que esta situación ha generado graves retrasos en la puesta en marcha de este centro de memoria histórica.