Escándalo mundial por trampa en juego de ajedrez con bolas anales

Una histórica derrota dejó en evidencia la trampa que hubo en el campeonato Julius Baer Generation Cup de ajedrez, con un método mucho más sorprendente de lo esperado: con bolas chinas anales. 

Durante el juego entre el imbatido -por dos años continuos-, Magnus Carlsen,   fue derrotado sorpresivamente por un joven norteamericano de 19 años, Hans Niemann. El noruego se retiró del torneo y después publicó un polémico trino que levantó las sospechas. “Me he retirado del torneo. Siempre me ha gustado jugar en este torneo y espero volver en el futuro”, dijo.

Trampas en el pasado

Las sospechas aumentaron más cuando Niemann admitió haber hecho trampa dos veces en el pasado; por dicha situación, la plataforma de ajedrez Chess.com emitió un comunicado en el que vetó a Niemann y desde entonces muchos aficionados al ajedrez aseguraron que  la derrota de Carlsen se realizó con trampas con bolas anales.

¿Confirmación?

Tras la polémica, Niemann se defendió en un tweett, pero el Presidente de Tesla, Elon Musk aseguró que: “El talento alcanza un objetivo que nadie más puede alcanzar, el genio alcanza un objetivo que nadie puede ver (porque está en tu trasero)”, explicó, por lo que la sospecha se habría confirmado.

Estratégica trampa

Las bolas chinas son un dispositivo que funciona para aumentar el tono muscular del suelo pélvico. Asimismo, se puede emplear como juguete sexual, sin embargo, en el  se usaría para transmitir los movimientos que debería hacer un jugador a partir de las vibraciones del dispositivo.

Según el portal La Razón, “La mecánica de la trampa sería simple: un cómplice que estuviera viendo en vivo el partido (como efectivamente se estaba transmitiendo), podría simular el juego real en una computadora y ver los movimientos de esta. Posteriormente, a través de las vibraciones, podría “avisar” al supuesto tramposo cuáles serían los movimientos sugeridos. Las bolas anales fácilmente pasarían cualquier control de seguridad”, explica.