La jornada legislativa culminó entre polémicas, destacando especialmente los debates sobre la reforma a la salud y comportamientos cuestionables dentro del recinto parlamentario.

El Gobierno nacional enfrentó resistencias para continuar el análisis de la reforma sanitaria. Múltiples bancadas intentaron aplazar la discusión, buscando postergar el proyecto hasta el próximo año.

Juan Fernando Cristo, ministro del Interior, fue enfático en su llamado: “Es el deber y la responsabilidad del Congreso avanzar en la discusión. Proponer derogar el decreto de sesiones extraordinarias es lo más exótico que he visto en tres décadas de vida parlamentaria”.

La sesión dio un giro inesperado cuando varios congresistas iniciaron un ‘compartir’ dentro del salón Elíptico, generando molestias entre los presentes.

Wadith Manzur, congresista, exigió respeto y recordó que el recinto legislativo “no es una corraleja”, enfatizando la necesidad de mantener el orden parlamentario.

Finalmente, la proposición para aplazar la reforma a la salud fue negada, lo que significa que el proyecto continuará su trámite durante las sesiones extraordinarias.

Víctor Salcedo, representante del Partido de la U, manifestó su inconformidad, advirtiendo sobre los riesgos de tramitar el proyecto “de afán”.