La movilización nacional de arroceros, programada para el lunes 3 de marzo, es una respuesta a la desatención del Gobierno Nacional a las peticiones del gremio y a la baja en los precios del arroz en cáscara. La situación actual del sector arrocero es crítica, y los productores están perdiendo cerca de dos millones de pesos por hectárea.

La baja en los precios del arroz en cáscara es uno de los principales motivos de la movilización. Los productores están recibiendo un precio de $185.000 por carga (125 kilos), lo que es insuficiente para cubrir los costos de producción. La desatención del Gobierno Nacional a las peticiones del gremio ha llevado a la frustración y la desesperación entre los productores.

Los arroceros solicitan un ajuste inmediato en los precios del arroz en cáscara, de $185.000 a $220.000 por carga (125 kilos). También solicitan un alivio de deudas a través de la implementación de una política de reprogramación de deudas, que incluya la condonación parcial de capital, reducción de intereses y acceso a líneas de crédito con tasas preferenciales. Además, abogan por una protección frente a los tratados de libre comercio a través de salvaguardias comerciales.

La movilización nacional de arroceros puede tener un impacto significativo en la economía del país. La producción y comercialización del arroz pueden verse afectadas, lo que puede llevar a una escasez de este producto en el mercado. Los consumidores pueden ver afectados sus bolsillos, ya que los precios del arroz pueden aumentar.

“La situación es crítica”, manifestó Carlos Rojas, gerente del distrito de riego del Río Coello. “Los productores están perdiendo cerca de dos millones de pesos por hectárea, lo que es insostenible”. Roberto Botero, vocero de las Dignidades Arroceras, agregó que “el sector arrocero está atravesando por una de las peores crisis en la historia reciente”.

Con información de la república y caracol radio