El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha emitido una alerta a través de sus canales oficiales, advirtiendo sobre las elevadas temperaturas que afectan varias regiones del país debido al fenómeno de El Niño. Según el informe, se prevé que El Niño persista durante el invierno del hemisferio norte y podría transicionar a una condición neutral entre abril y junio, con una probabilidad del 60%.

Esta situación climática eleva el riesgo de desabastecimiento de agua en diversos departamentos, siendo el Caribe, Valle del Cauca, Chocó, La Orinoquía, Los Andes y Caquetá los más susceptibles. Además, existe la preocupación por la posible propagación de incendios forestales, habiéndose registrado quemas en los cerros orientales de Bogotá, así como en Boyacá y Santander.

El Ideam ha identificado 33 municipios en amenaza por deslizamientos, con otros siete bajo alerta roja. Además, se reportan niveles bajos en las cuencas de los ríos Magdalena y Cauca.

Según las proyecciones del Ideam, El Niño persistirá hasta al menos el mes de abril, con un 60% de probabilidad de mantenerse hasta junio de 2024, según el actual panorama climático.

El instituto ha señalado que 952 municipios en Colombia están en alerta por incendios, distribuidos en diversos departamentos:

Antioquia: 32 municipios.
Arauca: 7 municipios.
Atlántico: 6 municipios.
Bogotá.
Bolívar: 26 municipios.
Boyacá: 94 municipios.
Caldas: 6 municipios.
Caquetá: 2 municipios.
Casanare: 18 municipios.
Cauca: 5 municipios.
Cesar: 23 municipios.
Chocó: 3 municipios.
Cundinamarca: 95 municipios.
Córdoba: 17 municipios.
Guainía: 2 municipios.
Guaviare: 3 municipios.
Huila: 21 municipios.
La Guajira: 13 municipios.
Magdalena: 29 municipios.
Meta: 27 municipios.
Norte Santander: 39 municipios.
Quindío: 9 municipios.
Risaralda: 2 municipios.
Santander: 36 municipios.
Sucre: 17 municipios.
Tolima: 33 municipios.
Valle del Cauca: 16 municipios.
Vichada: 4 municipios.

Ante esta situación, las autoridades y comunidades locales deben estar alerta y tomar medidas preventivas para mitigar los posibles impactos negativos derivados del fenómeno de El Niño, priorizando la conservación del agua y la prevención de incendios forestales.