Jhon Fredy Gil Franco, conocido cariñosamente como “Paloma”, concejal de Jamundí, Valle del Cauca, perdió la vida este sábado 27 de abril, tras ser víctima de un ataque armado en plena vía pública. El político, miembro del Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS), recibió doce impactos de bala mientras se encontraba en un establecimiento comercial en la glorieta de Riberas del Rosario.

Pese a ser trasladado de urgencia al Hospital Piloto de Jamundí, Gil Franco no logró sobrevivir a las graves heridas. El trágico suceso generó una ola de repudio y consternación, tanto en el ámbito local como nacional. Desde la alcaldía municipal de Jamundí hasta el alcalde de Cali, Alejandro Eder, expresaron su solidaridad con la familia del concejal y exigieron justicia ante este acto cobarde que atenta contra la democracia y las instituciones del país.

El presidente de la Comisión de Seguridad de la Asamblea Departamental, Rafael Rodríguez, denunció la falta de interés del Gobierno Nacional en garantizar el orden público en el Valle del Cauca, mientras que representantes de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y el MAIS rechazaron el crimen y manifestaron su preocupación por la persistencia de la violencia en el país.

Jhon Fredy Gil Franco, además de ser concejal, ejercía como vocero de la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Marihuana y Amapola (COCCAM). Su asesinato se suma al de Carlos Arturo Londoño, concejal de Tuluá por el Partido Conservador, ocurrido el 19 de abril. Londoño perdió la vida en un atentado perpetrado al término de un evento público, donde también resultó gravemente herida Clarivet Ocampo Fernández, funcionaria de la administración municipal.

El crimen de estos líderes políticos ha generado una profunda preocupación en la sociedad colombiana y ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de quienes ejercen funciones públicas en el país. Ante esta situación, la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, ofreció una recompensa de $50 millones por información que conduzca a la captura de los responsables, instando a las autoridades a redoblar los esfuerzos en la lucha contra la delincuencia y garantizar que los culpables sean llevados ante la justicia.

No había amenazas

Si bien el crimen está bajo investigación, Paola Castillo, alcaldesa de Jamundí, aseguró no tener reportes de amenazas de un atentado contra la vida de ninguno de los concejales. “Aparentemente, no había ningún tipo de amenazas contra el concejal ni los demás concejales no han expresado amenazas”, manifestó la mandataria jamundeña.