El comercio minorista en Colombia cayó en febrero y enfrenta desafíos

Por: Maria José Salcedo

16 abril, 2024

El comercio minorista en Colombia cayó en febrero y enfrenta desafíos

En febrero, el comercio minorista en Colombia experimentó una disminución del 1,8% en las ventas, según datos revelados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). Este retroceso se suma a una caída del 0,4% en el personal ocupado del sector en comparación con el mismo mes del año anterior, lo que refleja el difícil momento que atraviesa este campo en el país y las posibles repercusiones para todos los colombianos.

Las principales contribuciones negativas se observaron en las líneas de vehículos automotores y motocicletas, así como en equipo de informática y telecomunicaciones. Sin embargo, sectores como combustibles para vehículos automotores y alimentos registraron un aumento en los últimos meses, contrarrestando en parte esta tendencia negativa.

Los expertos de Bancolombia advierten que estas tasas podrían continuar disminuyendo, especialmente debido a la persistente inflación en el país. Además, señalan que este declive económico también se atribuye a la capacidad de gasto de los hogares y al deterioro en el mercado laboral, dos factores clave en la situación actual de Colombia.

Según los expertos, “esta evidente tendencia de deterioro continuaría motivada por el debilitamiento en la demanda en el consumo de los hogares como consecuencia de la aún alta inflación, que en marzo se redujo hasta un 7,36% anual, y el proceso de reducción de tasas de interés de política monetaria, actualmente en un 12,75%, que afectan la capacidad de gasto de los hogares, y por el deterioro en el mercado laboral que disminuyen el flujo de recursos disponibles de los consumidores”.

A pesar de las dificultades, los minoristas reportaron ganancias significativas en febrero, con un aumento del 4,7% en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando más de 8,7 billones de pesos colombianos. Esta cifra positiva genera optimismo en el DANE, que confía en que sectores como ventas de vehículos automotores, motocicletas, prendas de vestir y textiles puedan incrementar sus ganancias y contribuir al equilibrio económico general.