En medio de un complejo panorama de orden público marcado por un paro armado del Ejército de Liberación Nacional (ELN), atentados recientes y una persistente crisis de seguridad en varias regiones, el presidente Gustavo Petro anunció un remezón en la cúpula de las Fuerzas Militares de Colombia. La decisión fue dada a conocer la noche del sábado a través de su cuenta en la red social X, donde el mandatario aseguró que los cambios buscan garantizar “la seguridad y la democracia” de cara a los desafíos de 2026.

En su mensaje, el jefe de Estado oficializó los nuevos nombramientos en los más altos mandos militares. El general Hugo Alejandro López fue designado como comandante general de las Fuerzas Militares, mientras que el vicealmirante Harry Ernesto Reyna Niño asumió como jefe de Estado Mayor Conjunto.

En el Ejército Nacional, el mayor general Royer Gómez Herrera fue nombrado comandante del Ejército, acompañado por el mayor general Jaime Alonso Galindo como segundo comandante. En la Armada Nacional, el almirante Juan Ricardo Rozo asumió como comandante, y el vicealmirante Orlando Enrique Grisales fue designado segundo comandante y jefe de Estado Mayor Naval.

Por su parte, en la Fuerza Aeroespacial Colombiana, el mayor general Carlos Fernando Silva quedó al frente de la institución, mientras que el mayor general Alfonso Lozano Ariza fue nombrado segundo comandante y jefe de Estado Mayor.

Además de anunciar los relevos, el presidente Petro agradeció públicamente a los comandantes salientes por su gestión. Entre ellos mencionó al almirante Francisco Hernando Cubides Granados, comandante general desde julio de 2024; al general Luis Carlos Córdoba Avendaño, quien lideró la Fuerza Aeroespacial desde agosto de 2022; y al general Luis Emilio Cardozo Santamaría, comandante del Ejército desde junio de 2024.

El mandatario destacó que, bajo la dirección de estos oficiales, las Fuerzas Militares estuvieron al frente de operaciones relevantes, como la recuperación del corregimiento de El Plateado, en Argelia, Cauca. Este pronunciamiento se dio en una semana en la que volvió a ser noticia la crisis humanitaria en el Catatumbo, donde más de 250 familias han sido desplazadas por enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las extintas Farc.

En su balance de gestión, Petro aseguró que durante el último año se alcanzó un récord histórico en incautación de cocaína, con cerca de 1.000 toneladas decomisadas, lo que equivaldría, según cifras oficiales, a más de 12.000 millones de dosis que no llegarían a mercados internacionales. También señaló un incremento del 27 % en la ofensiva contra estructuras criminales y la neutralización de más de 4.400 integrantes de organizaciones narcotraficantes, además de la mayor incautación de armamento de la última década.

Este no es el primer remezón en la cúpula militar durante el actual Gobierno. En 2022, Petro retiró a cerca de 40 generales y almirantes como parte de la implementación de su política de seguridad humana, y en mayo de 2024 volvió a reconfigurar los mandos por la situación de orden público en el Cauca.

El ajuste más reciente se da luego de que, el pasado 15 de diciembre, las autoridades reportaran 51 acciones violentas en el marco del paro armado del ELN, entre ellas ataques contra la población civil y actos de intimidación en varias regiones del país. Las autoridades indicaron que los cambios en la cúpula buscan fortalecer la respuesta del Estado frente a estos desafíos de seguridad.