El presidente Gustavo Petro se pronunció este sábado sobre el bombardeo ordenado contra las disidencias de las FARC en Guaviare, que dejó como resultado la muerte de menores de edad según informó la Defensoría del Pueblo. El mandatario lamentó las muertes, pero defendió la operación militar argumentando que tenía como objetivo prevenir una emboscada contra efectivos del Ejército.

A través de su cuenta en la red social X, Petro reconoció que “es lamentable toda muerte de personas y más de menores de edad”. No obstante, explicó que la decisión de bombardear se tomó ante una situación de riesgo inminente para las tropas desplegadas en la zona.

“Si dejo avanzar los 150 hombres de Iván Mordisco que iban por la selva, entonces emboscan 20 soldados jóvenes que estaban al frente a pocos kilómetros. Quizás hoy la crítica que me harían es porque dejé emboscar a los soldados”, expresó el presidente.

El mandatario señaló que la determinación se adoptó bajo condiciones de riesgo para proteger la vida de los militares. “Tomé, a riesgo, la decisión de salvarles la vida. Es fácil teñir de rojo los mapas, es difícil reconocer los riesgos de recuperar territorio”, agregó.

Según la información entregada por el jefe de Estado, 150 hombres armados bajo el mando de alias ‘Iván Mordisco’ avanzaban por la selva del Guaviare en dirección a un pelotón de 20 soldados. Petro indicó que, aunque podía reforzar a las tropas con munición, existía la posibilidad de que fueran emboscados o contraemboscados.

“Perderíamos 20 jóvenes al servicio del estado y la sociedad”, argumentó el presidente para fundamentar su decisión de ordenar el bombardeo contra la estructura disidente.

En otro mensaje publicado en redes sociales, el mandatario advirtió que su política de paz “ha estado acompañada de acción militar cuando toca”. Esta declaración busca clarificar que los diálogos con grupos armados no excluyen operaciones de las Fuerzas Militares cuando la situación lo amerita.

Petro también se refirió a las acciones del Estado Mayor Central (EMC) en el Cauca, afirmando que responden a “su derrota”, tras la neutralización de 35 combatientes, la incautación de 35 fusiles, varias ametralladoras y la captura de varios de sus mandos.

El presidente aprovechó su pronunciamiento para destacar que durante su gobierno se han rescatado 2.411 niños, niñas y adolescentes “de las garras” de los grupos armados organizados. Esta cifra busca evidenciar el compromiso gubernamental con la protección de menores víctimas de reclutamiento forzado.

Las declaraciones presidenciales se producen como respuesta al informe revelado por la Defensoría del Pueblo, que inicialmente confirmó la muerte de seis menores de edad durante el bombardeo. Posteriormente, Medicina Legal elevó la cifra a siete menores fallecidos entre los 20 cuerpos recibidos tras la operación militar en la vereda Itilla del municipio de Calamar.

Con información de wradio y caracol radio