El Consejo de Estado se pronunció este jueves sobre una de las demandas presentadas contra la elección de José Ismael Peña como rector de la Universidad Nacional de Colombia para el periodo 2024-2027. En su fallo, la alta corte negó la nulidad del proceso realizado el pasado 21 de marzo por el Consejo Superior Universitario (CSU), al considerar que no se configuraron las causales alegadas por los demandantes.

La acción judicial había sido interpuesta por Erick Adrián Velasco Burbano, Leopoldo Múnera —actual rector en encargo—, Alberto Yepes, Rodrigo Uprimny y Cristian Dulcey, quienes cuestionaron la legalidad del procedimiento. Sin embargo, la Sala de lo Contencioso Administrativo determinó que la designación se ajustó a la normativa vigente y descartó que existieran vicios de nulidad.

El alto tribunal aclaró que su decisión se limita a declarar la legalidad del nombramiento, lo cual no implica el regreso inmediato de Peña al cargo. En el fallo se enfatizó que “no es competencia de esta jurisdicción el reconocimiento de derecho alguno, sino únicamente definir la validez de la designación efectuada”.

Método de elección en el CSU

Uno de los puntos centrales de la demanda era el uso del sistema ponderado conocido como “método Borda” en la votación del CSU. Los demandantes alegaban una presunta desviación de poder. No obstante, el Consejo de Estado concluyó que no se demostró que dicho mecanismo hubiera sido manipulado con fines distintos a los previstos en el ordenamiento jurídico.

La corporación precisó que el método empleado correspondió a la aplicación de la normativa interna de la Universidad Nacional y que no se probó la intención de excluir de manera arbitraria a algún candidato en particular.

Con esta decisión, el Consejo de Estado cierra una de las controversias jurídicas sobre la elección de José Ismael Peña, ratificando la validez del proceso que lo designó rector. No obstante, la definición sobre su eventual permanencia o regreso al cargo seguirá en manos de las autoridades universitarias competentes, en el marco de los procedimientos internos de la institución.

El fallo llega en un momento clave para la Universidad Nacional, que enfrenta debates sobre su autonomía, los mecanismos de elección de sus directivas y el rumbo académico y administrativo en los próximos años.