Un reciente estudio de la Cámara de la Industria de Motocicletas de la Andi ha revelado datos significativos sobre el crecimiento y el impacto socioeconómico de las motocicletas en Colombia. El informe destaca que en julio de 2024, el país alcanzó la cifra de 12 millones de motocicletas registradas, lo que representa el 62% del parque automotor nacional.
El análisis muestra un aumento notable en la adquisición de estos vehículos desde el año 2000. En 2023, se registraron 678.660 unidades nuevas, un incremento del 81,64% comparado con 2010. Este crecimiento ha generado más de 2,6 millones de empleos directos e indirectos, con el 93,35% de las motocicletas siendo de producción nacional.
Un dato sorprendente es el aumento de la participación femenina en la compra de motocicletas nuevas, alcanzando un 38% del total. Esta tendencia refleja una búsqueda de mayor independencia y autonomía en el transporte por parte de las mujeres, quienes ven en las motocicletas una solución práctica para evitar el tráfico urbano.
El perfil socioeconómico de los compradores es otro aspecto relevante. El 91% pertenece a los estratos 1, 2 y 3, con ingresos entre uno y tres salarios mínimos. En cuanto a la escolaridad, el 41% tiene educación técnica o tecnológica, el 30% universitaria y el 27% es bachiller. Estos datos subrayan la importancia de las motocicletas como opción de transporte asequible para los sectores menos favorecidos de la población.
Iván García, director ejecutivo del gremio, señaló que el 12,9% de los usuarios adquiere motocicletas para aumentar sus ingresos, mientras que el 20,9% las utiliza tanto para transporte como para trabajo. Esto resalta el papel crucial de estos vehículos en la generación de ingresos y el acceso a oportunidades económicas.
La presencia de motocicletas es más notoria en áreas rurales y departamentos como Valle, Antioquia y Bogotá, donde el 33,5% de los hogares posee una, en comparación con el 25,3% en áreas urbanas. A nivel nacional, el 27,2% de los hogares colombianos cuenta con una motocicleta, según la Encuesta Nacional de Calidad de Vida 2023.
El estudio también aborda el desafío de la seguridad vial. La industria ha invertido en capacitación y campañas de sensibilización que impactan anualmente a más de 16 mil motociclistas, además de implementar tecnologías para reducir accidentes.
Este panorama contrasta con países de altos ingresos como Estados Unidos, donde las motocicletas representan menos del 5% del parque vehicular, evidenciando el impacto económico y social distintivo de estos vehículos en Colombia.