La más reciente encuesta de Invamer, divulgada este 28 de agosto, revela cambios significativos en la percepción ciudadana sobre la gestión de los alcaldes de las principales ciudades colombianas, mostrando un panorama diverso donde algunos mandatarios logran afianzar su popularidad, mientras otros enfrentan desafíos crecientes.

En Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán logró revertir la tendencia negativa, alcanzando un 50% de aprobación, un incremento de tres puntos porcentuales respecto a la medición de junio. “Este aumento sugiere una mayor confianza en las políticas implementadas por Galán, a pesar de los desafíos que ha enfrentado su administración”, señala el informe de Invamer.

Por su parte, Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín, consolida su posición como uno de los mandatarios más populares del país. Con un 73% de aprobación, Gutiérrez supera su registro anterior del 70%, reflejando una gestión que parece resonar positivamente entre los medellinenses.

Sin embargo, no todos los alcaldes corren la misma suerte. Alejandro Éder, en Cali, experimenta una caída significativa en su índice de aprobación, pasando del 49% al 40%. Este descenso podría indicar “desafíos crecientes en la administración local de Cali y su impacto en la percepción ciudadana”, según analistas consultados.

En la costa caribe, Alejandro Char de Barranquilla y Dumek Turbay de Cartagena, aunque mantienen altos niveles de aprobación, muestran ligeras disminuciones en sus índices. Char registra un 72% de aprobación, mientras que Turbay alcanza un 74%, ambos experimentando pequeños retrocesos respecto a la medición anterior.

Jaime Andrés Beltrán, alcalde de Bucaramanga, enfrenta quizás el desafío más significativo, con una caída del 72% al 61% en su aprobación. “Este descenso sugiere que la gestión del alcalde podría estar enfrentando desafíos adicionales en la ciudad”, apunta el estudio de Invamer.

La encuesta, realizada entre el 17 y el 25 de agosto de 2024, contó con un margen de error del ±2,62%, ofreciendo una visión actualizada del sentir ciudadano hacia sus gobernantes locales.