El expresidente colombiano César Gaviria ha declinado por segunda vez la invitación a participar en la Comisión de Asesores de Relaciones Exteriores, programada para este martes 27 de agosto. Esta reunión, convocada por la Cancillería, tiene como objetivo principal abordar la crisis política en Venezuela, especialmente tras las controvertidas elecciones del 28 de julio en las que Nicolás Maduro fue presuntamente reelegido.

Gaviria mantiene su postura crítica frente a la política exterior del gobierno de Gustavo Petro, sin embargo, la tensión entre Gaviria y la administración actual parece haber alcanzado un punto crítico. Se reporta que el expresidente “ni siquiera le quiere contestar el teléfono” al canciller Luis Gilberto Murillo, quien ha logrado establecer comunicación con otros exmandatarios que integran la comisión.

Por su parte, el canciller Murillo intentó mostrar optimismo sobre la participación de otros líderes políticos en la reunión. En su cuenta de X (anteriormente Twitter), escribió: “Valoramos las apreciaciones dadas por los expresidentes @JuanManSantos y @AlvaroUribeVel, en la próxima semana tendremos la oportunidad de adelantar con el presidente @PetroGustavo una nueva sesión de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores”.

Sin embargo, la postura del expresidente Álvaro Uribe también parece distante. En un tuit reciente, Uribe calificó al gobierno venezolano como “una dictadura fascista-castrista, con más rabia, menos doctrina, completa corrupción y cero ética”.

El Partido Centro Democrático, liderado por Uribe, ha criticado duramente el comunicado conjunto entre Colombia y Brasil sobre las elecciones en Venezuela, calificándolo de “complicidad con el fraude”.

La crisis en el país vecino sigue siendo un tema de alta sensibilidad política en Colombia, y la falta de acuerdo entre los líderes políticos podría complicar los esfuerzos diplomáticos del país en la región.