Nuevo proyecto en el Congreso busca reformar el Consejo Nacional Electoral
Por: Maria José Salcedo
20 agosto, 2024
El Congreso de la República acaba de aterrizar un proyecto de acto legislativo que propone una reforma sustancial al Consejo Nacional Electoral (CNE), el organismo encargado de supervisar y regular las actividades electorales en Colombia. La iniciativa, liderada por el senador Humberto de la Calle y respaldada por más de veinte congresistas, promete generar un intenso debate político.
El CNE ha sido objeto de numerosas críticas, independientemente del gobierno de turno, debido a la manera en que se eligen sus magistrados. Actualmente, estos son postulados por los partidos políticos y seleccionados por el Parlamento, lo que ha generado dudas sobre su independencia y la imparcialidad de sus decisiones.
Propuesta de reforma al CNE
El proyecto presentado por De la Calle busca ampliar el mandato de los magistrados del CNE de cuatro a seis años y cambiar el proceso de selección. En lugar de que los partidos políticos propongan a los candidatos, se sugiere que la nominación se realice a través de un concurso de méritos. Además, la elección de los magistrados estaría a cargo de la Corte Constitucional, la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado, buscando así garantizar mayor imparcialidad.
Entre los requisitos propuestos, los aspirantes a magistrados no deben haber ocupado cargos directivos en partidos políticos ni haber sido candidatos en los siete años anteriores a su postulación. Asimismo, una vez concluido su mandato, no podrán ocupar cargos en partidos políticos ni aspirar a cargos de elección popular durante dos años.
Esta no es la primera vez que se intenta reformar el CNE. El año pasado, una propuesta similar presentada por De la Calle fracasó en la Comisión Primera del Senado. Algunos críticos argumentan que estas iniciativas buscan centralizar el poder en una única autoridad electoral, comparando la situación con la de Venezuela, donde existe una sola entidad encargada de la supervisión electoral.
Sin embargo, De la Calle defiende la reforma como una medida necesaria para corregir un sistema que considera “impresentable” debido a la falta de independencia. El senador sostiene que la selección meritocrática por parte de las altas cortes podría mitigar los problemas actuales y que, al igual que en la Junta Directiva del Banco de la República, los cargos de los magistrados se irían renovando de manera escalonada, evitando así la cooptación.
Por su parte, el senador Alejandro Carlos Chacón (Partido Liberal) se opone a la reforma, argumentando que ya existen mecanismos como el Consejo de Estado para resolver los conflictos con el CNE. Chacón considera que unificar todo el poder en una sola entidad electoral desequilibraría la democracia.
Perspectivas y desafíos
Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE), ha elogiado la propuesta, aunque advierte que la actual coyuntura política podría dificultar su aprobación. Barrios destaca la importancia de establecer periodos de seis años para los magistrados, siempre que estos sean escalonados, lo que permitiría preservar el conocimiento acumulado en la institución.
Además, Barrios resalta la relevancia de prohibir que los magistrados hayan sido candidatos o pertenecido a partidos políticos, ya que esto ha afectado la confianza en el CNE. También critica que exmagistrados del CNE puedan dirigir partidos políticos o presentarse a elecciones, calificando esta práctica como “un pésimo ejemplo”.
A pesar de los desafíos, la discusión sobre esta reforma ya ha comenzado, y su pertinencia cobra especial relevancia de cara a las elecciones de 2026. La gran pregunta es si los congresistas estarán dispuestos a dar el debate y apoyar un cambio que podría poner fin a los problemas de financiación y falta de confianza que han afectado al sistema electoral colombiano.
En medio de este debate, el CNE también está involucrado en investigaciones sobre la campaña presidencial de Gustavo Petro, quien ha sido acusado de violar los topes de campaña y de presunta financiación irregular. Estas investigaciones han sido cuestionadas por algunos sectores, que argumentan que los magistrados del CNE podrían estar influenciados por sus afiliaciones políticas.
La reforma propuesta por De la Calle busca precisamente eliminar estas influencias, asegurando que el CNE sea una entidad independiente y confiable, capaz de garantizar la transparencia y equidad en las elecciones.