La ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, anunció este jueves que Alemania prohibirá el uso de componentes de empresas chinas en las partes centrales de sus redes 5G a partir de 2026. La medida se toma por motivos de seguridad, con el fin de evitar riesgos de sabotaje y espionaje.

“Con esto protegemos el sistema nervioso central de Alemania”, declaró Faeser. “Protegemos la comunicación de los ciudadanos, las empresas y el Estado. Debemos reducir los riesgos de seguridad y, a diferencia del pasado, evitar dependencias unilaterales”.

La prohibición se aplica a las partes centrales de las redes 5G, que son consideradas críticas para la seguridad nacional. La medida es un golpe para las empresas chinas, que han estado ganando terreno en el mercado de las tecnologías de la información y la comunicación en Europa.

China respondió rápidamente a la medida, acusando a Alemania de discriminación. “Politizar cuestiones económicas, comerciales y de ciencia y tecnología no hará sino socavar los intercambios técnicos y la cooperación normales, y no beneficia a ninguna de las partes”, declaró Lin Jian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino.

La prohibición de componentes chinos en las redes 5G es un tema sensible en la relación entre Alemania y China. La medida puede tener implicaciones en las relaciones comerciales y diplomáticas entre ambos países, y puede influir en la forma en que otras economías y gobiernos abordan la implementación de redes 5G.

Con información de euronews