La reciente intervención gubernamental en S.O.S EPS ha colocado al Estado a cargo de aproximadamente 25,8 millones de afiliados al sistema de salud en Colombia, lo que representa un 50,4% del total de usuarios del país. Este hecho histórico ha despertado preocupaciones entre expertos sobre la calidad de los servicios de salud y la supervisión de los interventores designados para reemplazar a los representantes legales y las juntas directivas de las EPS.

Paúl Rodríguez, docente e investigador de la Universidad del Rosario, expresó su inquietud sobre la concentración de poder en la Superintendencia de Salud, que ahora supervisa una parte significativa del sistema de salud colombiano. Destacó que, si bien otras entidades como la Superintendencia de Industria y Comercio y la Superintendencia Financiera podrían ofrecer vigilancia adicional, la Supersalud es la única competente para supervisar las aseguradoras bajo control estatal.

En cuanto a la calidad del servicio, Ramón Abel Castaño, médico y consultor en sistemas de salud, destacó que la Supersalud tradicionalmente ha supervisado hospitales y EPS públicas. Sin embargo, planteó dudas sobre la alineación del superintendente con el Gobierno y cómo ejercería su función de vigilancia y control.

En medio de estas incertidumbres, se espera que las organizaciones de pacientes y las asociaciones de usuarios desempeñen un papel crucial en la supervisión, ya que no tienen afiliación política o ideológica.

¿Se Mejorará el Servicio?

Si bien la cobertura universal ha sido un logro del sistema de salud actual, la mala situación financiera de las EPS ha generado preocupaciones sobre la calidad de la atención. La intervención estatal se justifica en parte por este motivo, ya que se considera que estas empresas representan un riesgo para la salud de los colombianos.

Sin embargo, la interrogante persiste: ¿cambiará algo ahora que las EPS más grandes están bajo control estatal? Julio Alberto Rincón, interventor de la Nueva EPS, reveló que el presidente Petro ha ordenado que no haya ninguna muerte durante la intervención estatal, lo que refleja una clara voluntad política de mejorar la atención y la gestión de la salud.

La intervención del Gobierno en S.O.S EPS marca un hito importante en el sistema de salud colombiano, con implicaciones significativas para la supervisión, la calidad del servicio y la atención a los afiliados. A medida que se desarrolla esta intervención, será fundamental un monitoreo cuidadoso para evaluar su impacto y garantizar que se cumplan los objetivos de mejorar el acceso y la calidad de la atención médica en el país.