Inteligencia Artificial revoluciona detección temprana del cáncer de esófago
Por: Maria José Salcedo
19 abril, 2024
Un equipo de científicos chinos ha alcanzado un avance significativo en la detección temprana del cáncer de esófago mediante el desarrollo de una plataforma de inteligencia artificial (IA) que promete duplicar la tasa de detección de esta enfermedad en sus etapas iniciales.
El cáncer de esófago, una enfermedad silenciosa que a menudo no presenta síntomas hasta etapas avanzadas, cuenta con una tasa de supervivencia superior al 90 % cuando se diagnostica y trata en sus primeras fases. No obstante, esta cifra se reduce drásticamente a medida que la enfermedad progresa y los síntomas se vuelven evidentes.
La innovadora herramienta, impulsada por algoritmos de aprendizaje profundo y entrenada con más de 190.000 imágenes esofágicas, fue detallada en un estudio recientemente publicado en la revista científica Science Translational Medicine.
Los datos recolectados de diversas clínicas en China sirvieron como base para entrenar la inteligencia artificial, lo que permitió a la plataforma mejorar la precisión en la identificación de tumores y lesiones precancerosas.
En un ensayo clínico liderado por investigadores de hospitales en la provincia de Zhejiang y la ciudad de Wuhan, más de 3.000 participantes se sometieron a endoscopias, siendo la mitad de ellas evaluadas utilizando el nuevo sistema basado en IA.
Los resultados revelaron que la herramienta contribuyó a duplicar la tasa de detección de lesiones esofágicas de alto riesgo hasta un 1,8 %, en comparación con el grupo de control que registró un 0,9 %.
Mao Xinli, autor principal del estudio y miembro del Hospital Taizhou de Zhejiang, resaltó que el sistema de asistencia endoscópica permite a los endoscopistas con menos experiencia mejorar las tasas de detección de lesiones esofágicas de alto riesgo, reduciendo así la frecuencia de diagnósticos erróneos, según informó la agencia oficial Xinhua.
Este avance en el campo de la inteligencia artificial representa un hito crucial en la lucha contra el cáncer de esófago, ofreciendo nuevas esperanzas para una detección temprana y un tratamiento más efectivo de esta enfermedad.