Las zoonosis son enfermedades infecciosas que se transmiten de los animales vertebrados a los seres humanos y representan un desafío significativo tanto para la salud pública como para la economía regional, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Con el creciente papel de las mascotas en los hogares, es importante estar alerta a los riesgos que estas enfermedades pueden implicar, especialmente cuando no se les brinda el cuidado adecuado, convirtiéndose así en potenciales portadores de infecciones para sus familias.

Las zoonosis pueden ser causadas por virus, bacterias, parásitos y hongos. Entre las más comunes que pueden ser transmitidas por la saliva de los perros se encuentran:

Giardiasis: Causada por los parásitos Giardia intestinalis, puede ser transmitida a través de la saliva en zonas anales, manos o rostro. Aunque en muchos casos es asintomática, la giardiasis puede provocar diarrea mucosa o acuosa, cólicos estomacales, hinchazón, náuseas y episodios de diarrea acuosa, según Mayo Clinic. La infección intestinal requiere atención médica y tratamiento adecuado para evitar complicaciones.

Leptospirosis: Esta bacteria, Leptospira, se propaga a través del contacto con agua contaminada o la orina de animales infectados. Sin embargo, la saliva de los perros también puede representar un riesgo. Los perros infectados pueden mostrar fiebre alta, ictericia y deshidratación. En humanos, los síntomas incluyen fiebre, dolores musculares y, en casos graves, infecciones en los riñones. Es crucial mantener una buena higiene y evitar el contacto con agua estancada para prevenir el contagio.

Pasteurelosis: Causada por la bacteria Pasteurella multocida, que se encuentra en la boca de los perros. Al entrar en contacto con heridas, puede causar infecciones en la piel y los tejidos blandos. Esta bacteria es conocida por provocar infecciones graves si no se trata adecuadamente.

Rabia: Una de las zoonosis más temidas, la rabia se transmite a los humanos a través de mordeduras, arañazos y lameduras de mucosas o piel lesionada. Los síntomas incluyen miedo al agua, cambios en el estado de ánimo, fiebre, náuseas, vómitos y espasmos musculares. En sus fases avanzadas, puede causar parálisis y muerte. La prevención mediante vacunas y cuidado adecuado de las mascotas es crucial.

Gusanos Redondos y Planos: Parásitos como anquilostomas y tenias pueden ser transmitidos por la saliva contaminada de los perros tras lamerse el ano. Estos parásitos pueden causar síntomas digestivos y, en casos de tenias, quistes hidatídicos que afectan órganos internos. La desparasitación regular de las mascotas y la higiene adecuada son fundamentales para prevenir estas infecciones.

Para reducir el riesgo de zoonosis, es esencial mantener una higiene adecuada en los espacios donde los perros conviven con las personas. Según el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid, se recomienda:

– Lavarse las manos con jabón y agua después de tocar a las mascotas o limpiar sus desechos.
– Mantener a las mascotas saludables y seguir las recomendaciones del veterinario sobre vacunas y desparasitaciones.
– Recoger y eliminar adecuadamente las heces del perro para evitar la propagación de patógenos.

El cuidado y la prevención son fundamentales para garantizar la salud de las familias y mantener a las mascotas como miembros seguros y queridos de los hogares.