Dairo Antonio Úsuga, alias ‘Otoniel’, excomandante máximo del Clan del Golfo, declaró ante magistrados de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que su rápida extradición a Estados Unidos tuvo como objetivo evitar que siguiera revelando información sensible en Colombia.

La diligencia judicial se llevó a cabo en la Penitenciaría de Máxima Seguridad ‘ADX Supermax’ en Florence, Colorado, donde los magistrados Alejandro Ramelli y Gustavo Salazar recibieron el testimonio del exjefe paramilitar sobre casos de falsos positivos y crímenes contra la Unión Patriótica.

“La extradición tan rápida fue para el silencio, para silenciar más a uno, pues porque estaba declarando sobre muchas cosas allá como testigo”, afirmó Úsuga durante su intervención ante la JEP.

El testimonio de ‘Otoniel’, quien también comandó el Bloque Centauros de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en Arauca y Casanare, ha llevado a la JEP a ordenar investigaciones contra un mayor general, seis agentes estatales y tres civiles.

Durante el interrogatorio, cuando los magistrados indagaron sobre información pendiente por revelar, Úsuga respondió: “Siempre hay cosas que podían ampliar más las declaraciones”, aunque evitó señalar personas específicas, indicando que se trataba de “cosas en general”.

El excomandante paramilitar, extraditado en mayo de 2022, mencionó en su testimonio presuntos vínculos entre el paramilitarismo y diversos sectores de poder, incluyendo congresistas, empresarios y otros actores del ámbito político y económico.

Las declaraciones de ‘Otoniel’ forman parte de las investigaciones que adelanta la JEP sobre el conflicto armado colombiano y sus ramificaciones en diferentes esferas de la sociedad.