El jefe de gabinete de la Presidencia, Alfredo Saade, anunció que, por instrucción directa del presidente Gustavo Petro, el Gobierno emprenderá un nuevo proceso para la producción de pasaportes a través de la Imprenta Nacional en alianza con Portugal, descartando la continuidad del contrato con la unión temporal Documentos de Viaje 2025, integrada por Thomas Greg & Sons.

La decisión, comunicada desde la Casa de Nariño, marca un giro frente al anuncio previo de la ahora canciller saliente Laura Sarabia, quien había informado que se renovaría por 11 meses el contrato con TGAS bajo condiciones especiales, como la gestión de datos por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores. El presidente había autorizado incluso el uso de la figura de “urgencia manifiesta”, mecanismo que permite contratar de manera directa cuando se requiere una respuesta inmediata para garantizar un servicio esencial. Sin embargo, el mandatario revocó esa orden y le encomendó a Saade liderar el nuevo esquema de producción documental.

Según Saade, Thomas Greg & Sons deberá entregar 600.000 libretas de pasaporte, lo que daría un margen de entre cinco y seis meses mientras se adelanta el empalme con la Imprenta Nacional. El funcionario indicó que en las próximas horas se firmará un acuerdo con Portugal, aunque no precisó detalles sobre los términos contractuales ni los plazos exactos de implementación.

La viabilidad técnica de este plan ha sido cuestionada tanto dentro del Gobierno como por analistas independientes. El sindicato de trabajadores de la Imprenta Nacional, Sintraimprenal, advirtió que, según cálculos internos, el modelo de producción contemplado en el memorando con Portugal podría acarrear pérdidas de hasta 85.000 millones de pesos y que la entidad no estaría lista para asumir la demanda.

En medio de estos cruces, el presidente Petro ha insistido en la necesidad de “cambiar el contrato” con Thomas Greg & Sons. El pasado 6 de mayo, cuestionó públicamente a la directora de la Imprenta Nacional, Viviana León, pidiéndole que no prorrogara el convenio: “¡No me lleven hasta el último día para decir que hay que prorrogar el contrato! ¡No me engañen!”, afirmó entonces.