La reforma laboral impulsada por el Gobierno Nacional superó este martes un paso decisivo en el Congreso de la República, al ser aprobada en tercer debate por la Comisión IV del Senado. El proyecto, que ha sido eje de discusiones técnicas y políticas, ahora se encamina a su etapa final en la plenaria del Senado, donde enfrentará un contexto legislativo más complejo.

Tras la votación, el ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, ofreció una rueda de prensa en la que destacó los principales logros alcanzados en esta fase del trámite legislativo. Según el jefe de la cartera, la aprobación de esta etapa permitió rescatar varios puntos estratégicos que habían sido incluidos inicialmente en la ponencia radicada en la Cámara de Representantes.

“Logramos mantener los recargos nocturnos, dominicales y festivos efectivos; logramos mantener el contrato a término indefinido como regla general, limitar el contrato a término fijo y limitar el contrato por prestación de servicios”, subrayó Sanguino, refiriéndose a los pilares que, según el Gobierno, buscan garantizar estabilidad y condiciones dignas para los trabajadores en Colombia.

Uno de los artículos más significativos aprobados fue el artículo 11, que establece que el recargo nocturno comience desde las 7:00 p.m., en lugar de las 9:00 p.m. como ocurre actualmente. También se aprobó el artículo 15, que dispone el pago del 100% de recargo por trabajo en días festivos, lo cual fue posible gracias a una proposición de la senadora Angélica Lozano.

Además, el ministro destacó que se mantuvieron disposiciones orientadas a la formalización laboral de diversos sectores tradicionalmente excluidos. Entre ellos se encuentran las madres comunitarias, las manipuladoras de los programas de alimentación escolar, así como los periodistas, trabajadores de la cultura y otros grupos poblacionales que hasta ahora no habían sido reconocidos plenamente por la legislación laboral.

En palabras de Sanguino, estos avances representan un paso importante hacia una reforma que busca modernizar las relaciones laborales y fortalecer el acceso a derechos laborales para miles de trabajadores en el país.

No obstante, el ministro también señaló que todavía hay temas críticos pendientes por discutir en la plenaria del Senado. Entre ellos, mencionó el artículo relacionado con los contratos laborales para aprendices del Sena, un punto de alta prioridad para el Ejecutivo. “Es un asunto en el que seguiremos insistiendo”, enfatizó.

Sanguino también se refirió al papel que ha jugado la consulta popular en el proceso de recuperación de esta reforma, tras su hundimiento previo. Según indicó, este mecanismo fue determinante para que el debate volviera a abrirse y para que el Congreso retomara la discusión.

“Gracias a la consulta popular se pudo revivir esta reforma laboral. Sin consulta, esta reforma estaría sepultada. Por esa razón, para nosotros, el seguro de vida de la reforma laboral y de las reformas sociales es la consulta y nos mantenemos en que el pueblo colombiano ejerza su poder en las urnas”, afirmó el ministro.

El proyecto de ley tiene como plazo máximo el 20 de junio para ser aprobado en la plenaria del Senado, de lo contrario se archivará, lo que significaría su tercer hundimiento consecutivo en el Congreso. Frente a este escenario, el Ministerio del Trabajo reiteró su compromiso con buscar consensos y fortalecer el diálogo político con las distintas bancadas para lograr que la reforma llegue a ser ley de la República.

Con estos avances, la reforma laboral continúa posicionándose como uno de los ejes centrales de la agenda social del Gobierno Petro, y su desenlace en las próximas semanas marcará un momento clave en la evolución del marco laboral colombiano.