La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció este jueves un paro armado indefinido que iniciará el 9 de noviembre en los ríos San Juan, Sipí y Cajón, en el departamento del Chocó, generando preocupación entre las autoridades y la población civil.

“Esperamos que la población cumpla para evitar incidentes”, advirtió el grupo insurgente en un comunicado, justificando su decisión como respuesta a la presencia militar en la región, específicamente al despliegue de “un buque de guerra y cinco lanchas artilladas de la Armada” que patrullaron el río San Juan durante octubre.

La tensión en la zona se ha incrementado tras la confirmación de la presencia de contingentes armados pertenecientes a los frentes Cacique Calarcá y Manuel Hernández ‘El Boche’ del bloque occidental del ELN en la frontera entre Risaralda y Chocó. Los grupos armados ilegales han intensificado sus acciones intimidatorias mediante la instalación de panfletos y pendones con mensajes amenazantes en puntos estratégicos entre las localidades de Santa Cecilia (Risaralda) y Guarato (Chocó).

Ante esta situación, el coronel Servio Rosales, comandante de la Octava Brigada del Ejército, declaró: “Trabajamos intensamente para garantizar la seguridad y evitar cualquier tipo de acción que perturbe la tranquilidad de los habitantes”. El oficial confirmó que se están desarrollando operaciones de seguridad en conjunto con unidades del Gaula Militar y estableció canales de comunicación para que la ciudadanía denuncie actos de extorsión o amenazas.