En las últimas horas, un video viral protagonizado por una mujer que defiende la opción de comer ‘corrientazo’ en lugar de cocinar en casa ha generado un intenso debate en las redes sociales.

En la grabación, una ama de casa sostiene un animado intercambio con su esposo, quien inicialmente expresa su sorpresa ante la decisión de su esposa de no cocinar más y optar por comer en restaurantes. La mujer, armada con un cuaderno y una calculadora, emprende la tarea de explicar detalladamente por qué considera más económica la opción del ‘corrientazo’.

“¿Cuánto me gasté ayer en el almuerzo?”, inicia la mujer, desglosando los costos de los ingredientes utilizados para la comida casera. Desde la carne hasta los condimentos y las verduras, la detallada explicación alcanza los $22.900, mientras que el ‘corrientazo’ se presenta como una opción más económica a $9.000.

La protagonista del video destaca la inclusión de servicios adicionales, como agua, jabón de lavar platos, gas y luz, como factores que incrementan los costos de cocinar en casa. Argumenta que la opción del ‘corrientazo’ resulta más rentable y ofrece la ventaja de incluir una sopa en la comida.

El video ha desatado una oleada de opiniones en internet, con algunos internautas expresando incredulidad sobre la economía real del ‘corrientazo’, mientras otros respaldan la idea de la mujer. Comentarios que van desde cuestionamientos sobre los precios de los ingredientes hasta reflexiones sobre la importancia de la salud en la elección de la alimentación han inundado las redes.

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En otro video la pareja muestra que se fue a comer al sitio en Barranquilla donde ellos compran un corrientazo a 9.000 pesos, aunque normalmente cuesta 10.000 pesos en ese lugar.

“La gente cree que es mentira que almorzamos en restaurante. Mi esposa sacó la cuenta y es más rentable”, comentó la pareja en redes sociales mostrando los platos que ambos se comieron.

Y ¿qué comieron? El almuerzo que compraron en 9.000 pesos contenía pollo guisado, fríjoles, arroz, tajadas maduras y ensalada y agua de panela, como bebida. También un plato de sopa, un detalle que les llamó la atención a los esposos.