El panorama de la educación superior en Colombia presenta un giro inesperado según los últimos datos del Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (Snies). Contrario a las expectativas generadas por las políticas gubernamentales de ampliación de cupos y gratuidad, las instituciones públicas experimentaron una significativa disminución en el número de estudiantes matriculados durante el 2023, mientras que las privadas registraron un crecimiento.

El informe revela que las Instituciones de Educación Superior (IES) públicas sufrieron una caída de 7.368 estudiantes, pasando de 1’341.339 en 2022 a 1’333.971 en 2023. Por el contrario, las instituciones privadas incrementaron sus matrículas de 1’124.889 a 1’141.862 en el mismo período.

Luis Ernesto Restrepo, experto en educación y analista de la Unesco, expresó su preocupación: “Evidentemente, hay algo muy malo en estos datos. En primer lugar, porque una entidad tan importante para el Sena, que es gratuito, que puede llegar a todas las regiones y que debería ser la principal herramienta en la ampliación de cobertura, por el contrario, está reduciendo su capacidad”.

El caso del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) es particularmente alarmante, con una pérdida de 31.839 estudiantes en el último año, alcanzando su nivel más bajo de matrículas en al menos una década.

De las 74 IES públicas del país, 39 experimentaron un decrecimiento en sus matrículas. Entre ellas, destacan instituciones de renombre como la Universidad Nacional de Colombia (-1.788), la Escuela Superior de Administración Pública -Esap (-3.011), la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia – UPTC (-3.218) y la Universidad Distrital Francisco José de Caldas (-7.061).

No obstante, el panorama no es completamente sombrío. La Universidad Nacional Abierta y a Distancia (Unad) se destaca como un caso de éxito entre las instituciones públicas, logrando un incremento de 28.146 estudiantes y consolidándose como la institución con mayor número de matriculados.

A pesar de estos desafíos, la tasa de cobertura del sistema educativo superior mostró un ligero aumento del 0,45%, alcanzando un histórico 55,38%. Sin embargo, este crecimiento se ve opacado por la caída en las matrículas de pregrado, mientras que los posgrados experimentaron un aumento.

El Ministerio de Educación aún no ha revelado las cifras de deserción para el 2023, lo que podría arrojar luz sobre las causas de esta tendencia preocupante en el sector público, especialmente en un contexto donde el gobierno ha prometido aumentar en 500.000 los cupos durante el actual cuatrienio.