El Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada reveló hallazgos críticos tras una exhaustiva misión en Colombia, exponiendo un problema estructural que continúa afectando a diversos sectores de la sociedad.

La delegación internacional detectó que las desapariciones forzadas en Colombia no son un fenómeno histórico, sino una problemática vigente que impacta transversalmente a múltiples grupos poblacionales, incluyendo niños, líderes sociales, migrantes, periodistas, excombatientes y maestros.

Las investigaciones preliminares destacaron:

– Entre 98.000 y 200.000 personas han desaparecido
– Persisten desapariciones vinculadas a reclutamiento forzado
– Existe fragmentación institucional en la búsqueda
– No hay un registro centralizado confiable

El informe señaló problemas estructurales como:

– Mandatos institucionales superpuestos
– Necesidad de coordinar hasta 60 autoridades en procesos de búsqueda
– Ausencia de un sistema unificado de información
– Limitada capacidad de respuesta efectiva

Las familias enfrentan obstáculos burocráticos significativos, sin claridad sobre dónde buscar apoyo o cómo exigir sus derechos. El miedo a represalias y la desconfianza en las autoridades agravan la situación, especialmente en zonas controladas por grupos armados.

El Comité de la ONU exigió:

– Racionalizar mandatos institucionales
– Reducir la burocracia
– Mejorar la coordinación interinstitucional
– Fortalecer mecanismos de rendición de cuentas

La delegación publicará un informe completo en abril de 2025, tras compartir hallazgos preliminares con autoridades colombianas.

“Cada persona desaparecida representa una familia que espera respuestas”, enfatizaron los investigadores internacionales.

Con información de Naciones Unidas