La Presidencia de la República expidió la Resolución 294 del 5 de septiembre de 2025, clasificando al Clan del Golfo como Grupo Armado Organizado (GAO) y reconociendo oficialmente su autodenominación como “Ejército Gaitanista de Colombia”. La medida, firmada por el ministro del Interior Armando Benedetti, se enmarca en los diálogos que adelanta el Gobierno con esta organización en Catar.

Familia Gaitán rechaza uso del nombre del líder liberal

La decisión generó rechazo inmediato de la familia del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, quien consideró la medida una agresión al legado político del dirigente asesinado en 1948.

“La familia Gaitán rechaza con firmeza y profundo dolor la autodenominación utilizada por el Clan del Golfo, como un intento de apropiarse del gaitanismo, un legado que pertenece al pueblo colombiano y que representa la justicia social, la democracia y la dignidad”, expresaron en un comunicado oficial.

Los familiares enfatizaron que permitir a un grupo armado ilegal presentarse como “gaitanista” constituye una ofensa a la memoria de quienes dedicaron su vida a esa causa, subrayando que el gaitanismo nunca será sinónimo de violencia.

Fundamentos legales del reconocimiento

La resolución se fundamenta en los artículos 2, 22, 93 y 189 de la Constitución Política, que establecen la paz como derecho y deber de obligatorio cumplimiento, así como en la Ley 418 de 1997 y la Ley 1908 de 2018. El documento incorpora pronunciamientos de la Corte Constitucional sobre la capacidad exclusiva del presidente para conducir acercamientos con organizaciones armadas ilegales.

Según la resolución, el Ejército Gaitanista de Colombia cumple los requisitos legales para ser clasificado como GAO, incluyendo contar con mando responsable y control territorial sobre determinadas zonas, según caracterización del Ministerio de Defensa.

El acto administrativo detalla que la organización adelanta un “Espacio de Conversación Socio Jurídica” con agenda orientada a obtener soluciones al conflicto armado, lograr la aplicación efectiva del Derecho Internacional Humanitario y el respeto a los derechos humanos.

Los diálogos buscan el cese de afectaciones a la sociedad civil y el tránsito al Estado de Derecho de los combatientes, desarrollándose actualmente en territorio catarí como sede de las conversaciones.

La resolución aclara expresamente que el reconocimiento como GAO “no se les otorgará carácter político, porque no lo tienen”, restringiendo su tratamiento a lo dispuesto por la legislación colombiana y excluyendo prerrogativas de negociación con grupos insurgentes.

El nuevo estatus no implica la suspensión de operaciones militares o policiales contra el Ejército Gaitanista de Colombia. El marco regulatorio especifica que modifica los dispositivos aplicables bajo el Derecho Internacional Humanitario, pero no detiene la persecución penal ni la acción de la fuerza pública.

Los términos de sometimiento a la justicia serán definidos por el Gobierno Nacional según considere necesario para pacificar territorios y lograr el sometimiento legal de la estructura. Tales compromisos estarán sujetos a verificación por instancias nacionales o internacionales, según acuerden las partes.

La resolución establece que cualquier mención a “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” en documentos y actos administrativos será entendida como referida al Ejército Gaitanista de Colombia. Esta modificación responde a comunicados oficiales emitidos por la organización desde 2024.

La Consejería Comisionada de Paz debe informar formalmente a todas las autoridades competentes sobre el contenido y efectos del acto administrativo, asegurando la implementación uniforme de la nueva denominación en las instituciones estatales.

La medida representa un paso significativo en el proceso de diálogo con una de las principales estructuras criminales del país, manteniéndose dentro del marco legal colombiano para el manejo de grupos armados organizados.

 

 

 

Con información de wradio e infobae