Un accidente del camión cisterna en la vía Barbosa y Ubaté ha generado una emergencia ambiental en el departamento de Santander. El derrame de 11.000 galones de ACPM en el río Suárez ha obligado a la Corporación Autónoma Regional de Santander (CAS) y a la empresa Transportes Álvarez a implementar un plan de contingencia para evitar que la situación empeore.

La emergencia ambiental ha afectado a dos municipios de Santander, Güepsa y Barbosa, que se encuentran sin agua potable desde el día del accidente. La suspensión del abastecimiento de agua es una medida de prevención para evitar que la población y los animales se vean afectados por el derrame.

Maricela Téllez, funcionaria de la CAS, manifestó que ya se ha iniciado la limpieza del afluente con ayuda de un desengrasante especial que evitará que las manchas del combustible tengan un impacto mayor sobre la fauna y la flora. “Se aplicó un desengrasante que caerá en el río, se tiene todo el registro. La empresa va a entregar los respectivos informes y ya se inició con la remoción del material vegetal sobre el cual inicialmente cae el líquido. Se inició la limpieza del río”, dijo Téllez.

El plan de contingencia implementado por la CAS y Transportes Álvarez busca evitar que el derrame de ACPM avance y agrave la emergencia ambiental. La limpieza del afluente y la remoción del material vegetal son solo algunos de los pasos que se están llevando a cabo para mitigar los efectos del accidente.

Con información de Caracol Radio