El general Luis Emilio Cardozo, comandante del Ejército Nacional de Colombia, ha señalado al Ejército de Liberación Nacional (ELN) como el único responsable de una serie de atentados contra infraestructura petrolera en los departamentos de Arauca y Norte de Santander. Esta declaración se produce en medio de una creciente preocupación por la seguridad energética del país.

Según Cardozo, las subestructuras del ELN conocidas como Frente de Guerra Oriental y Frente de Guerra Nororiental están detrás de estos ataques. El comandante hizo hincapié en que las operaciones militares están enfocadas en la captura de los líderes de estos grupos, particularmente del frente Domingo Laín.

El oleoducto Caño Limón – Coveñas ha sido el objetivo principal de estos ataques, sufriendo cinco atentados en lo que va del año 2024. El más reciente ocurrió el 28 de agosto en La Gloria, departamento del Cesar, apenas dos días después de otro ataque que amenazó el suministro de gas en la región oriental del país.

Estos incidentes han puesto de manifiesto la vulnerabilidad de la infraestructura energética colombiana. El oleoducto Caño Limón, crucial para el transporte de petróleo, ha sido blanco de más de 1.500 ataques en las últimas tres décadas, lo que subraya la persistencia de este problema de seguridad.

El Ejército Nacional asegura estar trabajando en coordinación con las empresas encargadas de las reparaciones, al tiempo que ajusta sus estrategias y lleva a cabo operaciones ofensivas contra los grupos delincuenciales. “Estamos siempre con las operaciones emprendidas sobre los cabecillas de esos dos frentes de guerra”, afirmó el general Cardozo.

Estas declaraciones se produjeron durante una ceremonia en el Fuerte Militar de Tolemaida, donde 527 jóvenes suboficiales ascendieron al grado de Cabo Tercero, reforzando así las filas del Ejército en su lucha contra estos grupos armados.