Defensoría: víctimas por desplazamiento forzado en Norte de Santander llegó a 32.000

Por: Maria José Salcedo

22 enero, 2025

Defensoría: víctimas por desplazamiento forzado en Norte de Santander llegó a 32.000

La región del Catatumbo atraviesa una de las peores crisis humanitarias de los últimos años, con cifras alarmantes de desplazamiento, víctimas mortales y un colapso generalizado en la capacidad forense e infraestructura sanitaria.

La Defensoría del Pueblo, liderada por Iris Marín, informó que más de 32.000 personas han sido desplazadas forzosamente debido a los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las FARC. Las ciudades de Cúcuta (15.086 desplazados), Ocaña (11.503) y Tibú (5.300) han recibido la mayor parte de la población desplazada.

En un esfuerzo conjunto con la Iglesia Católica y las autoridades locales, la Defensoría logró la liberación de 32 personas retenidas y el levantamiento del confinamiento de mujeres y niños que habían quedado atrapados sin acceso a recursos básicos. Además, el ELN se comprometió a facilitar el acceso humanitario y reducir sus acciones bélicas en la zona.

Conflicto armado en el Catatumbo desbordó morgues de Cúcuta y Ocaña

La violencia en la región ha dejado al menos 80 víctimas mortales, aunque el paradero de muchos cuerpos sigue siendo incierto. Según el Instituto Nacional de Medicina Legal, se han identificado 33 cadáveres y entregado 26 a sus familias, pero las instalaciones forenses de Cúcuta y Ocaña están desbordadas.

Freddy Arengas Romero, secretario de Gobierno de Ocaña, denunció la falta de cuartos fríos adecuados en su municipio, lo que ha obligado a trasladar cuerpos a otras ciudades como Bucaramanga. Los equipos forenses están en mal estado, y el proceso de identificación de las víctimas puede tardar hasta cinco días, agravando la situación.

El director del Instituto Departamental de Salud, Fernando Augusto Álvarez García, alertó sobre el impacto en la salud pública. La descomposición de los cuerpos no gestionados a tiempo genera riesgos de enfermedades y brotes infecciosos en la región.

Ante la emergencia, las autoridades han habilitado morgues temporales en hospitales, pero estas también han alcanzado su capacidad máxima. Álvarez García pidió medidas urgentes como la implementación de unidades móviles o contenedores refrigerados para enfrentar la crisis.

La magnitud de la emergencia en el Catatumbo evidencia la falta de preparación para manejar las consecuencias del conflicto armado. Miles de personas desplazadas, una infraestructura insuficiente y un sistema forense colapsado reflejan la necesidad de una intervención humanitaria inmediata.