El Caribe colombiano enfrenta una crisis energética que ha llevado a miles de usuarios a manifestarse en las calles, expresando su inconformidad ante el aumento exorbitante de las tarifas del servicio eléctrico. Bajo el lema “Comemos o pagamos la luz”, la población se ve obligada a enfrentar un dilema desgarrador, especialmente en una región con altos índices de pobreza.

Las empresas prestadoras del servicio, Air-e y Afinia, han sido blanco de constantes críticas y protestas debido a las tarifas desproporcionadamente altas. Esta situación ha generado una creciente preocupación por la falta de una solución viable, alimentando un clima de inconformismo que amenaza con desbordarse en actos de violencia.

El descontento se ha manifestado en ataques a la infraestructura de las empresas y sus operarios, convirtiéndose en un factor perturbador del orden público. Bloqueos y hechos violentos se han registrado en varios municipios de la región en los últimos días, reflejando la magnitud de la crisis.

Un análisis realizado por Cartagena Cómo Vamos reveló que los habitantes de Barranquilla y Cartagena pagan tarifas considerablemente más altas que el resto del país. Comparando los precios del kilovatio en diferentes capitales, se evidenció que en Barranquilla y Cartagena se registran los costos más elevados, lo que agrava la situación de los ciudadanos.

Ante esta problemática, gremios y empresarios han alzado su voz, argumentando que las altas tarifas representan un obstáculo para el desarrollo y la competitividad de la región. La reciente resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), que establece aumentos adicionales en las tarifas, ha generado aún más preocupación y rechazo.

Zandra López, presidenta del Comité Intergremial, denunció que esta medida es injusta y tendrá un impacto negativo en la competitividad y rentabilidad de las empresas. Por su parte, Efraín Cepeda Tarud, líder de Intergremial Atlántico, advirtió sobre el riesgo de tensiones sociales y crisis adicionales debido a facturas más elevadas.

En el Congreso, el tema tarifario ha sido objeto de debate, con un enfoque en los altos cobros a las poblaciones costeñas. El representante Wadith Manzur lideró un debate de control político, reafirmando el compromiso del gobierno de buscar soluciones para reducir las tarifas en el Caribe.