Crisis humanitaria en Chocó tras paro armado y enfrentamientos entre ELN y Clan del Golfo

Por: Elizabeth Montoya

7 noviembre, 2023

El “paro armado” por 72 horas decretado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el municipio del Alto Baudó, departamento del Chocó, obligó al desplazamiento de 2.893 personas, pertenecientes a 714 núcleos familiares del centro norte de esta población. Sin embargo, se estima que el total de personas confinadas asciende a 14000 en todo el Alto Baudó por los enfrentamientos por el poder entre el ELN y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, también conocido como Clan del Golfo.

Este “paro armado” absurdo en medio de un cese al fuego, es el sexto de este año en el departamento, impulsado por el Frente de Guerra Occidental Ómar Gómez del ELN, que ha estado en conversaciones de paz con el Gobierno colombiano desde el año pasado. Las restricciones impuestas por las guerrillas en estos “paros armados” incluyen la limitación del movimiento de vehículos por carreteras y la movilidad de las personas, amenazando con ataques, lo que resulta en una escasez de alimentos y otros productos esenciales en las comunidades afectadas.

Son 19 en total las comunidades obligadas a confinarse: Puerto Palacios, Puerto Indio, Puerto Tomás, Villa Nueva, Puerto Ángel, Peña Alta, Tambo, Pureza, Jangadó, San Francisco de Cugucho, Santa Rita, entre otros centros poblados; y una comunidad, la de Mojaudó (154 personas que integran 39 núcleos familiares), fue desplazada hasta el sitio conocido como Chachajó debido a la confrontación armada entre el ELN y las Autodefensas Gaitanistas (AGC – Clan del Golfo).

 

Sin ingresos y con grave violación de sus derechos

La necesidad de atención para las comunidades afectadas es urgente y se requieren acciones coordinadas para abordar esta crisis humanitaria. La población confinada se ha visto gravemente afectada por la imposibilidad de utilizar el río Baudó y sus afluentes habituales para llegar a sus cultivos, que representan su principal fuente de sustento, lo que agrava su vulnerabilidad y la violación de sus derechos fundamentales.

La Defensoría del Pueblo ha insistido en la importancia de que las autoridades nacionales, departamentales y locales se aboquen a atender esta emergencia y respondan de manera efectiva y oportuna para garantizar la seguridad y el bienestar de estas comunidades afectadas por este “paro armado” del ELN en el Chocó.

La colaboración entre las autoridades y la sociedad civil es esencial para brindar asistencia y apoyo a quienes enfrentan dificultades debido a la violencia en la región. La atención urgente es crucial para mitigar los impactos de esta situación crítica en el Chocó.

El personero del Alto Baudó, Eriberto Andrade Palacios, ha informado que otro comunicado del ELN señala que “el paro armado es indefinido”, por lo que las autoridades locales esperan una respuesta oportuna por parte de las autoridades nacionales.