La Policía Metropolitana de Barranquilla enfrenta una crisis sin precedentes tras la presunta renuncia masiva de más de 100 agentes. El motivo principal de estas dimisiones serían los traslados forzosos a regiones conflictivas como Cauca, Valle del Cauca y Putumayo, donde los uniformados se verían expuestos a enfrentamientos con grupos armados ilegales, incluidas disidencias de las FARC.

Un agente, que prefirió mantener el anonimato, declaró a la revista Semana: “Hubo traslados para todas las zonas del país y pues a mí me tocó irme al Cauca porque así fue la directriz que dieron desde acá. Uno no sabe si va a volver muerto o va a terminar secuestrado, pero es la única opción porque no hay trabajo en esta época.”

Según fuentes internas, estos traslados podrían ser represalias contra uniformados que no se han adaptado a las directrices de la Metropolitana de Barranquilla (Mebar) o que enfrentan investigaciones disciplinarias. La institución, por su parte, ha justificado los movimientos como parte de una política nacional de rotación de personal para optimizar la presencia policial en zonas conflictivas.

En un comunicado oficial, la Policía afirmó: “Algunos de ellos ya habían cumplido un ciclo en la Metropolitana de Barranquilla, por lo que se consideró necesario un cambio de lugar de trabajo. Estos traslados se realizan habitualmente y es parte de la dinámica institucional de la Policía Nacional.”

Sin embargo, la situación ha generado un clima de temor entre los agentes. Otro uniformado expresó: “Yo tengo varios compañeros que han pedido el retiro porque prefieren pasar hambre en Barranquilla, cerca de su familia, que vivir con la zozobra de que en cualquier momento a uno lo pueden matar los grupos ilegales.”

Mientras la crisis se desarrolla, el director de la Policía Nacional, general William René Salamanca, visitó recientemente el Ecoparque Ciénaga de Mallorquín, donde anunció nuevas estrategias de seguridad en colaboración con la Alcaldía Distrital. Esta iniciativa busca fortalecer la presencia policial en áreas turísticas y ambientales, aunque no aborda directamente la problemática de los traslados y renuncias.