¿Cómo afectará a los ciudadanos de Bogotá el plan de racionamiento?
Por: Maria José Salcedo
6 abril, 2024
La capital colombiana, Bogotá, enfrenta una grave crisis de escasez de agua debido a la marcada disminución en los niveles del embalse Chingaza, su principal fuente de abastecimiento. Ante esta situación, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) ha anunciado un plan de racionamiento de agua que entrará en vigor a partir del próximo lunes 8 de abril y se extenderá por tiempo indefinido.
El plan de racionamiento consistirá en una rotación por zonas en 19 de las 20 localidades de la ciudad. Es decir, se implementarán cortes programados del suministro de agua en diferentes áreas de la ciudad en diferentes momentos del día. Los detalles específicos de esta programación se darán a conocer el próximo lunes, cuando entre en vigor el plan.
La gerente del Acueducto, Natasha Avendaño, adelantó que esta medida se aplicará en todos los municipios que tienen venta de agua en bloque, incluyendo Madrid, Mosquera, Funza, La Calera, Cota, Cajicá, Sopó y Tocancipá. Esto significa que la restricción en el suministro de agua no solo afectará a los habitantes de Bogotá, sino también a aquellos que residen en las zonas aledañas que reciben agua de la capital.
Es importante destacar que el objetivo principal de este plan de racionamiento es evitar el agotamiento completo de los embalses y garantizar un suministro mínimo de agua para todos los ciudadanos. Ante la crítica situación de los embalses, que se encuentran en niveles históricamente bajos, es fundamental adoptar medidas de conservación y hacer un uso responsable del agua.
El alcalde de Bogotá, Carlos Galán, ha hecho un llamado urgente a la ciudadanía para que colabore en esta situación. Se recomienda tomar duchas cortas, recolectar el agua fría de la ducha mientras se calienta en un balde, utilizar la lavadora con la carga completa, cerrar la llave al cepillarse los dientes y en general, adoptar prácticas que contribuyan al ahorro del agua en las actividades diarias.
Ante la incertidumbre climática y el alto consumo, es fundamental la colaboración de todos los ciudadanos para enfrentar esta crisis hídrica de manera efectiva y garantizar un suministro sostenible de agua para el futuro.