En un histórico cierre que fusionó biodiversidad y cultura, Cali culminó este viernes la decimosexta Conferencia de las Partes sobre Diversidad Biológica (COP16) con una masiva celebración que inundó el centro de la ciudad.

La jornada de clausura, que se desarrolló en la emblemática Plaza de Cayzedo, congregó a cientos de caleños que se unieron al alcalde Alejandro Eder para celebrar el éxito del evento internacional. El punto culminante de la celebración fue el intento de establecer un nuevo Récord Guinness con la clase de salsa más multitudinaria del mundo, amenizada por ritmos del Pacífico colombiano.

“Cali le cumplió al mundo. Hicimos la mejor COP16 de la historia”, manifestó Eder durante su intervención, destacando el carácter reconciliador del encuentro internacional. El mandatario local resaltó la fortaleza de los caleños y su compromiso con el desarrollo de la cumbre.

La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, también se sumó a las celebraciones, enfatizando el papel de la región como “paraíso de biodiversidad única y riqueza cultural sin igual”. Sus palabras resonaron entre los asistentes mientras destacaba el renovado civismo y unión demostrados durante las dos semanas del evento.

La emotiva despedida alcanzó su momento más significativo cuando una ola de aplausos se extendió desde la Plaza de Cayzedo hasta el Bulevar del Río, evidenciando el impacto positivo que la cumbre tuvo en la ciudadanía. Esta manifestación espontánea de gratitud consolidó a Cali como una ciudad capaz de albergar eventos de talla mundial mientras celebra su identidad cultural.

Durante dos semanas, la capital vallecaucana se convirtió en el epicentro mundial de las discusiones sobre biodiversidad, demostrando su capacidad para combinar la seriedad de una cumbre internacional con la alegría y el sabor característicos de la cultura caleña.