La capital colombiana se encuentra sumida en una ola de violencia que ha disparado las cifras de homicidios en lo que va del año. Las autoridades han encendido las alarmas ante un pico que, según la concejala Diana Diago, representa “una cifra histórica en comparación con los últimos seis años”.

En los primeros cuatro meses de 2024, Bogotá registró un total de 354 homicidios, una cifra que ha puesto a prueba las estrategias de seguridad implementadas en la ciudad. Los reportes oficiales revelan patrones preocupantes, como el hecho de que el domingo es el día en el que se cometen más actos de violencia contra la vida.

“El día de descanso de los bogotanos es el día donde la vida está mayormente en riesgo”, advirtió Diago, quien consideró que las cifras de la Secretaría Distrital de Seguridad, Convivencia y Justicia deben tomarse como un “llamado de atención para actuar de inmediato”.

Además, las estadísticas muestran que una gran cantidad de estos crímenes se cometen durante las horas nocturnas, lo que ha generado un ambiente de temor entre los ciudadanos.

“Hoy los bogotanos tienen miedo de salir a las calles y con justa razón, esperamos firmeza y contundencia para combatir el delito”, puntualizó la concejala.

Tres localidades se han convertido en focos de particular preocupación debido al aumento alarmante de homicidios en comparación con el año anterior. San Cristóbal encabeza la lista con un incremento del 81,8%, seguida de Usme con un 72,7% y Usaquén con un 45,5%.

Estas zonas continúan reportando actos de violencia casi a diario, lo que ha llevado a las autoridades a enfocar sus esfuerzos en incrementar las labores de seguridad en estas áreas para frenar el avance del crimen.

“Galán tiene un reto enorme en materia de seguridad. Hoy la delincuencia sigue a sus anchas y como resultado tenemos el pico más alto de homicidios de los últimos 6 años”, advirtió Diago, haciendo un llamado al alcalde para tomar medidas contundentes.

Las cifras revelan que las armas de fuego son el principal medio utilizado por los delincuentes, con 209 casos registrados, seguidas por las armas blancas con 111 casos y las armas contundentes con 34 casos.

Uno de los casos más recientes que ha conmocionado a la ciudad ocurrió en la localidad de Usme, donde dos hombres con heridas de bala llegaron a un centro de atención en salud y fallecieron a pesar de los esfuerzos médicos. Las autoridades sospechan que el hecho estuvo relacionado con una disputa por el control territorial y el tráfico de estupefacientes.