Aumenta la explotación ilícita de oro en Colombia pese a reducción del área

Por: Daniel Bueno

23 noviembre, 2023

La explotación ilícita de oro aluvial en Colombia creció el año pasado, concentrándose en su mayoría en los departamentos de Chocó, Antioquia y Nariño, así lo alertó un informe de la ONU. Esto a pesar de que el área total de extracción se redujo.

“El 73% de la explotación se clasifica como ilícita, con un incremento de 5 mil 000 hectáreas frente a 2021”, precisó el estudio de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

El área detectada pasó de 98 mil 567 hectáreas en 2021 a 94 mil 733 el año pasado pero la porción sin permisos legales creció hasta las 69 mil 123 hectáreas.

La mitad de la extracción es en zonas protegidas

Al organismo también le preocupa que cerca de la mitad de la actividad se realiza en zonas de reserva ambiental y recursos naturales donde está prohibida la minería.

Los mayores focos de extracción ilegal continúan siendo Chocó, con el 40% del total nacional, Antioquia y Bolívar, que en conjunto concentran el 85% de toda la explotación aurífera del país.

El informe de la ONU también advirtió que cerca del 44% de los territorios donde se registró extracción ilegal de oro el año pasado presentaban cultivos de coca en 2021.

“La explotación ilícita de oro y la presencia de cultivos de coca son dos fenómenos que convergen en algunos territorios”, señaló el estudio.

Graves daños ambientales

Adicionalmente, la minería ilegal está ocasionando severos daños ambientales como lo es la deforestación, la contaminación de fuentes hídricas con sustancias tóxicas y la destrucción de los ecosistemas.

Entre 2021 y 2022 se perdieron más de 11 mil hectáreas de alto valor ambiental, casi la mitad correspondiente a la selva primaria, de acuerdo al documento de la UNODC.

Preocupa especialmente la afectación en zonas como el Chocó Biogeográfico, epicentro de la extracción ilícita de oro en el país.

Ante este panorama, el organismo internacional hace un llamado a combatir la minería criminal y promover prácticas sostenibles y amigables con el medio ambiente.