Anuncian medidas para reducir consumo de agua en Bogotá ante bajo nivel de embalses

Por: Maria José Salcedo

13 septiembre, 2024

Anuncian medidas para reducir consumo de agua en Bogotá ante bajo nivel de embalses

El embalse de Chuza, parte fundamental del Sistema Chingaza, que abastece de agua a la sabana de Bogotá, enfrenta una situación crítica. Actualmente, su capacidad se encuentra al 44 %, y según estimaciones del Ministerio de Ambiente y otras entidades, podría disminuir hasta el 22 %para diciembre de 2023, lo que no sería suficiente para abastecer a la capital colombiana y sus alrededores durante los primeros meses de 2025.

La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, explicó que el embalse de Chuza, que depende de las lluvias de la región de la Orinoquía, ha visto reducidas las precipitaciones en los últimos meses, situación que empeora debido a los efectos del cambio climático y fenómenos meteorológicos como El Niño.

Actualmente, el embalse sostiene un consumo de 11 metros cúbicos por segundo en el sistema interconectado de abastecimiento de Bogotá, pero, para evitar una crisis, Muhamad advirtió que este consumo deberá reducirse drásticamente a 3 metros cúbicos por segundo, el equivalente al abastecimiento diario de una ciudad de 1,2 millones de habitantes.

Medidas para enfrentar la crisis de agua

Frente a la situación, Ruth Maritza Quevedo, directora ejecutiva de la Comisión de Regulación de Agua Potable (CRA), anunció que se implementarán cuatro medidas clave para reducir el consumo de agua y preservar las reservas. Estas medidas aún no tienen una fecha de implementación definida, ya que dependen de la desactivación de la Resolución 257.

Las medidas son las siguientes:

1. Ajustes en los topes de consumo por estrato socioeconómico: Los usuarios de los estratos 1 al 4 tendrán un máximo de 12 metros cúbicos de agua al mes, mientras que los estratos 5 y 6 podrán consumir 9 metros cúbicos. Aquellos que superen estos límites verán un **cobro doble** por metro cúbico adicional, y el precio variará según el prestador del servicio.

2. Cobros adicionales para sectores comerciales e industriales: Se implementarán tarifas excesivas para las empresas que excedan los promedios de consumo de agua, aún por definir.

3. Regulación de contratos de suministro de agua: Se priorizarán los usos domésticos y las actividades esenciales relacionadas con la alimentación sobre otras actividades no prioritarias en el suministro de agua.

4. Instrucción a prestadores de servicio: Se hace un llamado a todos los prestadores de agua para que apliquen las medidas necesarias y contribuyan al cumplimiento de las metas de reducción de consumo.

El déficit hídrico que afecta al embalse de Chuza está relacionado con las escasas lluvias en la Orinoquía, región clave para su abastecimiento. Este fenómeno no es nuevo, pues la directora del Ideam, Ghisliane Echeverry, informó que las lluvias han disminuido progresivamente durante los últimos tres años, con una situación crítica desde julio de 2023.

Durante el primer semestre del año, el país enfrentó las consecuencias del fenómeno de El Niño, caracterizado por el aumento de temperaturas y la sequía en algunas regiones. Aunque el Ideam anunció en julio de 2023 el fin de El Niño, las lluvias continúan siendo escasas, con un déficit del 60 % en regiones como el sur del Caribe, el Pacífico y partes de la región Andina.

Se espera que el fenómeno de La Niña—con lluvias más intensas—se manifieste en octubre de 2023, según informes de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA). Sin embargo, este fenómeno ha tardado más de lo previsto, lo que ha complicado la recuperación de los niveles de agua en el Sistema Chingaza.