Desde diciembre de 2023 entró en vigor la modificación oficial del nombre del tradicional “Día de la Raza” por “Día de la Diversidad Étnica y Cultural Colombiana” y este 2024 será el primer año en celebrarse esta transformación, que busca promover una visión más inclusiva de la historia nacional.

La iniciativa, que comenzó su recorrido legislativo en octubre de 2022, culminó exitosamente tras superar cuatro debates en el Congreso. Adriana Molano, viceministra de los Patrimonios, las Memorias y la Gobernanza Cultural, destacó la importancia de esta modificación: “Este cambio demuestra que la transformación social es, en esencia, un cambio cultural. Reconocemos a los 115 pueblos indígenas, las comunidades afrodescendientes, el pueblo Rrom y la población campesina como sujetos fundamentales de derecho”.

Un cambio que trasciende lo simbólico

El 12 de octubre, fecha que tradicionalmente conmemoraba la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492, ha sido objeto de debate debido a su asociación con la colonización española y la subsecuente marginación de las poblaciones originarias. La nueva denominación pretende subsanar esta perspectiva histórica sesgada y celebrar la riqueza cultural que define a la nación colombiana.

Esta decisión no es un caso aislado en Latinoamérica. Varios países de la región han adoptado medidas similares:

• Argentina: “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”
• Chile: “Día del Encuentro de Dos Mundos”
• Nicaragua: “Día de la Resistencia Indígena, Negra y Popular”
• Venezuela: “Día de la Resistencia Indígena”

Impacto y proyección

Según datos oficiales citados por la viceministra Molano, las comunidades étnicas representan entre el 10% y el 25% de la población colombiana. El cambio de nombre busca visibilizar a estos grupos y reconocer sus contribuciones a la construcción de la identidad nacional.

“La sociedad colombiana se ha edificado sobre una narrativa que, inadvertidamente, ha fomentado la segregación”, señalan expertos del Ministerio de Cultura. Con esta modificación, se espera promover un diálogo intercultural más equitativo y superar las divisiones históricas que han marcado al país.

El respaldo institucional a esta iniciativa, formalizado mediante la Resolución 0138 del 31 de mayo de 2021 del Ministerio de Cultura, representa un compromiso tangible con la construcción de una sociedad más inclusiva y respetuosa de su diversidad étnica y cultural.