El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) confirmó que el excomandante paramilitar Salvatore Mancuso no tiene requerimientos judiciales pendientes y, por lo tanto, se hizo efectiva su salida de la cárcel La Picota de Bogotá.

La liberación de Mancuso se produjo después de que la juez de ejecución de sentencias de Justicia y Paz ratificó la orden de libertad emitida el 4 de marzo. El INPEC verificó que no había requerimientos judiciales pendientes contra Mancuso, notificando a 31 autoridades judiciales entre jueces, tribunales y fiscalías de todo el país.

Antes de su liberación, el INPEC solicitó a la Unidad Nacional de Protección (UNP) que garantice un esquema de seguridad para proteger la vida e integridad de Mancuso. La coordinación con la UNP es crucial para asegurar la seguridad del excomandante paramilitar.

Después de 16 años en prisión en Estados Unidos por narcotráfico, Mancuso regresó a Colombia en febrero y fue recluido en la cárcel La Picota.

Es importante destacar que Mancuso fue nombrado por el Gobierno de Gustavo Petro como Gestor de Paz, un cargo que le permitirá trabajar en la construcción de la paz en Colombia. Su liberación y nuevo rol generan expectativas y desafíos para el país.