El pueblo de Malambo, en el Atlántico, se tiñó de blanco en una emotiva manifestación el sábado, exigiendo justicia por el brutal asesinato de Steffany Barranco Oquendo. Steffany, de 32 años, fue víctima de un ataque con arma blanca por parte de su ex pareja sentimental, Iván José de La Rosa, mientras se encontraba en su lugar de trabajo el pasado miércoles, alrededor de las 5:10 de la tarde.

La protesta estuvo marcada por arengas, globos y pancartas con mensajes extraídos de las redes sociales de Steffany, días antes de su trágica muerte. Familiares y amigos cercanos se unieron para exigir la máxima pena para De La Rosa y para hacer eco de la lucha contra la violencia de género, un flagelo que cobra la vida de muchas mujeres en el país.

En medio del clamor por justicia, Martha Villanueva, vecina de la familia de Steffany, hizo un llamado al Gobierno nacional para que este crimen no quede impune. Señaló la importancia de hacer cumplir las leyes existentes y asegurar que ningún hombre más se atreva a cometer un acto tan atroz. Villanueva expresó su preocupación por los hijos de Steffany, quienes ahora se quedan sin madre debido al acto criminal de su padre.

Desde la escuela de cadetes José María Córdoba, el presidente Gustavo Petro también se pronunció sobre el suceso, calificando a Iván José de La Rosa como un “delincuente” y lamentando profundamente lo ocurrido. Petro hizo un llamado a que el crimen no quede impune y resaltó la importancia de erradicar la violencia de género en todas sus formas.