Judicializan los presuntos asesinos del sacerdote apuñalado y arrollado en Ocaña

Por: Elizabeth Montoya

7 junio, 2024

La Fiscalía General de la Nación ha imputado cargos a Josse Antonny Montilla Jovito, de 29 años, y a Misael Rodolfo Valdez Pedroza, de 21, por su presunta responsabilidad en el homicidio del sacerdote Ramón Arturo Montejo Peinado, párroco de la iglesia San Rafael de Ocaña, corregimiento Buenavista. El trágico suceso ocurrió el pasado 4 de junio en el barrio Jesús Cautivo de Ocaña, Norte de Santander.

Según las investigaciones realizadas por la Fiscalía, el sacerdote se encontraba en un parqueadero donde estaba su vehículo cuando fue abordado por los dos hombres, quienes lo atacaron con armas cortopunzantes, causándole la muerte. “El material de prueba recaudado da cuenta que cuando Montilla Jovito y Valdez Pedroza intentan huir del parqueadero con el vehículo de la víctima, esta es arrollada”, señaló un portavoz de la entidad.

Las indagaciones adelantadas por la policía judicial permitieron establecer que los implicados serían conocidos de la víctima, ya que habían realizado negocios en el pasado. Gracias a la rápida acción de uniformados de la Policía y el Ejército Nacional, en coordinación con investigadores del CTI, los procesados, de nacionalidad extranjera, fueron capturados en flagrancia.

Un fiscal de la Seccional Norte de Santander imputó a los dos hombres el delito de homicidio agravado. Sin embargo, los indiciados no aceptaron su responsabilidad en los hechos durante la audiencia. En los próximos días, el juez a cargo del caso definirá la fecha para la audiencia de medida de aseguramiento.

La comunidad de Ocaña se encuentra conmocionada por este trágico suceso, que ha acabado con la vida de un querido líder espiritual. El padre Ramón Arturo Montejo Peinado, de 45 años de edad, era conocido por su dedicación a la labor parroquial y su compromiso con la paz y la justicia en la región.