En los municipios de Dagua y La Cumbre, en el Valle del Cauca, la presencia de grafitis intimidatorios vinculados a la estructura disidente de las FARC, conocida como Jaime Martínez, generó inquietud entre la población local. Ante esta situación, el Ejército Nacional respondió con contundencia, desplegando operativos para restaurar la seguridad y tranquilidad en la región.

Según informó Ana María Sanclemente, secretaria de Seguridad del Valle, el Batallón de Alta Montaña N°3, en colaboración con las alcaldías, movilizó unidades para eliminar los grafitis y asegurar la zona, demostrando el compromiso de las fuerzas de seguridad con la protección ciudadana.

“Inmediatamente nuestro Batallón de Alta Montaña No. 3 desplegó algunos hombres para que se hicieran presentes en esta zona y, en compañía de los alcaldes, se realizaron trabajos de limpieza en el sector”, declaró Sanclemente.

De acuerdo con la información proporcionada por la comunidad, dos individuos a bordo de una motocicleta serían los responsables de estos actos intimidatorios, desplazándose entre municipios. Por ello, el despliegue militar no solo busca proteger a los ciudadanos, sino también localizar y capturar a estas personas.

En Tuluá, también en el Valle del Cauca, la fuerza pública implementó medidas efectivas para prevenir actos violentos, incluyendo la restricción nocturna de circulación de motocicletas y la detención de personas vinculadas a intentos de desestabilización.

En esta población, se registraron dos intentos de incendiar taxis, pero gracias a la rápida intervención de las autoridades y la colaboración ciudadana, se logró frustrar los ataques y capturar a uno de los presuntos autores.

El alcalde de Tuluá, Gustavo Vélez, detalló las medidas adoptadas, como sanciones por incumplimiento de restricciones y la remoción de polarizados en taxis para mejorar la seguridad. Además, se han inmovilizado 15 motocicletas y se han impuesto 22 citaciones, mientras que 30 taxis se han despolarizado voluntariamente.

Por su parte, la gobernadora Dilian Francisca Toro anunció el cartel de los más buscados en el departamento y ofreció una recompensa de hasta 80 millones de pesos por información veraz sobre estas personas.