La fiscalía general de la Nación formuló cargos contra el exsenador y expresidente Álvaro Uribe Vélez por su presunta responsabilidad en los delitos de fraude procesal, soborno y soborno en actuación penal. El fiscal primero delegado ante la Corte Suprema de Justicia, Gilberto Villarreal, acusó a Uribe de ser el “determinador” de la presunta manipulación de testigos como Carlos Enrique Vélez Ramírez, Juan Guillermo Monsalve Pineda y Eurídice Cortés Velasco.

Según la Fiscalía, Uribe contó con un “apoyo consciente, deliberado y sistemático de múltiples personas” para idear una estrategia que buscaba obtener testimonios y pruebas que desvirtuaran o cuestionaran las declaraciones previas de exparamilitares como Pablo Hernán Sierra García y Monsalve Pineda en su contra y de su hermano Santiago.

El ente acusador señala que el exmandatario determinó al abogado Diego Cadena Ramírez para que, presuntamente, ofreciera prebendas o coimas a testigos seleccionados a cambio de que declararan a su favor, induciendo así en error a la Sala de Instrucción No. 2 de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema para obtener decisiones “contrarias a la ley”.

La jueza 44 de Conocimiento de Bogotá, Sandra Heredia Arana, declaró formalmente acusado a Uribe tras la presentación del escrito de acusación por parte de la Fiscalía. El proceso ahora pasará a la etapa de descubrimiento probatorio.

En el escrito, el fiscal Villarreal destaca que Uribe habría instruido a Cadena para que testigos como Monsalve Pineda faltaran a la verdad y ocultaran información relevante, citando una reunión en la cárcel La Picota donde Cadena presuntamente le pidió a Monsalve firmar un documento en el que negaba sus declaraciones previas contra los Uribe.

La Fiscalía ha reconocido como víctimas en el caso al senador Iván Cepeda, Deyanira Gómez (exesposa de Monsalve), el exfiscal Eduardo Montealegre y el exvicefiscal Jorge Fernando Perdomo, aunque el Tribunal Superior definirá si acepta o no a Perdomo, Gómez y Montealegre en esa condición.