La estructura Jaime Martínez de las disidencias de las FARC perpetró un violento ataque contra la Fuerza Pública en el norte del departamento del Cauca, generando afectaciones en infraestructura civil y restricciones en la movilidad por la vía Panamericana. Los hechos se registraron durante la madrugada de este sábado en varios municipios de la región.

El ataque más complejo se presentó en el corregimiento de Mondomo, zona rural del municipio de Santander de Quilichao, donde la estación de Policía fue hostigada durante más de una hora. Los disidentes utilizaron ráfagas de fusil y explosivos lanzados desde drones para ejecutar la acción armada.

Como resultado del hostigamiento, varias viviendas y establecimientos comerciales resultaron con graves afectaciones en su infraestructura. La comunidad reportó que varios drones sobrevolaron la estación policial, se activaron cilindros explosivos en diferentes sectores del pueblo y se escucharon constantes ráfagas de fusil.

Durante la reacción de las autoridades, un helicóptero fue impactado y debió realizar un aterrizaje de emergencia. Los policías quedaron confinados en la estación solicitando refuerzos de otras zonas del departamento, mientras la población vivía momentos de angustia.

El general Hernando Africano, comandante de la Tercera División del Ejército Nacional, informó que tras conocer la situación desplegaron acciones ofensivas en el territorio. Las Fuerzas Militares lograron derribar dos drones cargados con explosivos.

“La reacción oportuna evitó una acción terrorista de alto impacto”, afirmó el oficial. Además, destacó que fueron enviados vehículos blindados al corregimiento de Mondomo para reforzar la seguridad en la zona.

El general Africano señaló que las tropas lograron recuperar el control y restablecer la normalidad en la vía Panamericana, que había sido alterada por los subversivos con la instalación de artefactos explosivos.

Los hechos fueron atribuidos a alias ‘Jairo Ramírez’ y alias ‘Max Max’, pertenecientes a la compañía móvil Pablo Guerrero de la estructura Jaime Martínez de las disidencias de las FARC.

La situación de orden público se extendió a otros puntos del norte caucano. En el sector de Pescador, municipio de Caldono, se reportó presencia de disidentes que obligaban a transportadores a atravesar sus vehículos en la vía para impedir el paso.

Adicionalmente, se registró un retén ilegal en el sector de La Agustina, en Santander de Quilichao, donde los armados amenazaron e intimidaron a conductores. Estas acciones restringieron completamente el tránsito por la vía Panamericana.

La alcaldía de Santander de Quilichao rechazó los sucesos que vulneran la tranquilidad de los ciudadanos y alteran la convivencia territorial. “Hacemos un llamado a los actores armados para frenar cualquier acción que ponga en riesgo a la población civil y a respetar los Derechos Humanos”, expresó la administración municipal.

La secretaría de gobierno local se desplazó hasta la zona para verificar los daños materiales y el número de familias damnificadas. Aunque se reportaron personas con lesiones por los explosivos, no se ha entregado un reporte oficial sobre víctimas.

Por su parte, el gobernador del Cauca, Octavio Guzmán, condenó con firmeza los actos violentos y anunció coordinación con las alcaldías, la Fuerza Pública y organismos de salud. “Nuestra respuesta será siempre la unión, la acción decidida del Estado y el compromiso con la defensa de la vida. Estamos garantizando la atención a los heridos, reforzando la seguridad y manteniendo presencia institucional en la zona”, puntualizó.

Los reiterados ataques evidencian la tensión que vive el norte del Cauca por la presencia de estructuras disidentes que continúan ejecutando acciones armadas contra la población civil y las autoridades.

 

 

 

Con información de wradio y bluradio