La Policía Metropolitana de Cali logró la desmantelación de un laboratorio clandestino de drogas sintéticas, ubicado estratégicamente en pleno centro de la ciudad. El operativo, llevado a cabo por la Unidad Nacional de Intervención Policial (Unipol), se desarrolló en una vivienda del barrio San Bosco.

En esta redada, se logró incautar un variado arsenal de medicamentos de uso controlado, entre los que destacan sustancias como fentanilo, morfina y ketamina. Estas peligrosas drogas sintéticas se producían de manera clandestina, aprovechando la apariencia inofensiva de una vivienda común.

Dos individuos, conocidos con los alias “Gato chinga” y “Mono”, fueron capturados en flagrancia durante el operativo. Sorprendentemente, la cocina de una de las viviendas fue acondicionada para la fabricación de estas sustancias, utilizando métodos artesanales y utensilios de uso doméstico, como ollas arroceras.

El “Gato chinga”, señalado como el principal responsable de la fabricación, también tenía a su cargo la comercialización y la administración de canales de expendio, principalmente a través de plataformas de redes sociales. Por otro lado, el alias “Mono” se encargaba de la dosificación y coordinaba las rutas de distribución, optando por la modalidad de entrega a domicilio, especialmente en la zona céntrica y en establecimientos nocturnos.

El decomiso en el lugar del operativo fue considerable e impactante. Además de los medicamentos de alto poder adictivo, se incautaron un arma de fuego tipo pistola, un proveedor, 16 cartuchos y aproximadamente 400 dosis de drogas sintéticas, incluyendo anfetaminas. Entre los medicamentos confiscados se encontraban al menos 200 miligramos de fentanilo, morfina y ketamina, componentes fundamentales en la elaboración de estas sustancias prohibidas.

La Policía Metropolitana de Cali informó que, según sus investigaciones, los detenidos comercializaban alrededor de 200 dosis en un solo fin de semana. Esta cifra representaba ingresos criminales que superaban los $270 millones mensuales, resaltando la magnitud del impacto de este laboratorio clandestino en el tráfico de drogas de la ciudad.

El coronel Carlos Oviedo, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, enfatizó la importancia de este operativo y agradeció el trabajo oportuno de la Sijín. Asimismo, resaltó la labor investigativa que continuará para brindar seguridad y tranquilidad a la ciudadanía.

Los detenidos, “Gato chinga” y “Mono”, enfrentan cargos por tráfico de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego. Un Juez de Control de Garantías dictó medida de aseguramiento intramural para ambos, marcando un hito en la lucha contra el narcotráfico en Cali.