Venezuela solicitó formalmente a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) que intervenga ante el operativo antinarcóticos que Estados Unidos mantiene en el Caribe desde agosto, según reveló este domingo una carta del presidente Nicolás Maduro durante la segunda conferencia ministerial 2025 de la alianza OPEP+.

La vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez dio lectura al documento durante el encuentro ministerial liderado por Arabia Saudita y con participación de Rusia. En la misiva, Maduro solicitó “los mejores esfuerzos para contribuir a detener esta agresión que se gesta con cada vez más fuerza y amenaza seriamente los equilibrios del mercado energético internacional”.

El mandatario venezolano advirtió que está “en grave peligro la estabilidad de la producción petrolera venezolana y el mercado mundial”, en referencia al despliegue militar estadounidense en aguas del Caribe.

El dispositivo desplegado por Estados Unidos incluye buques destructores, aviones de combate, miles de efectivos militares y el portaaviones más grande del mundo. Caracas sostiene que estas maniobras trascienden el objetivo declarado de combatir el narcotráfico y responden a una estrategia para derrocar al gobierno venezolano, considerado ilegítimo por Washington.

El presidente Donald Trump declaró el sábado que el espacio aéreo venezolano debía considerarse “cerrado en su totalidad”, intensificando lo que Caracas califica como un cerco marítimo y aeronáutico sobre el territorio nacional.

La semana anterior, el gobierno estadounidense emitió una alerta aérea por el incremento de actividad militar en la zona. Seis aerolíneas internacionales acataron la advertencia y suspendieron sus conexiones con Venezuela.

Este domingo, la agencia de viajes rusa Pegas Touristik, que operaba vuelos frecuentes hacia la isla de Nueva Esparta en el norte venezolano, también suspendió sus operaciones siguiendo la alerta estadounidense. Desde 2021, Venezuela y Rusia firmaron múltiples convenios turísticos que permitieron la llegada de miles de visitantes rusos a Nueva Esparta, cuya economía depende principalmente del sector turístico.

Por el momento, Venezuela mantiene activas dos rutas hacia Rusia mediante la aerolínea estatal Conviasa, preservando la conexión con uno de sus principales aliados internacionales en medio del creciente aislamiento aéreo.

El gobierno venezolano sostiene que el verdadero objetivo del operativo estadounidense es controlar las mayores reservas petroleras del planeta, ubicadas en territorio venezolano, planteando la situación como una amenaza al equilibrio del mercado energético global ante los países miembros de la OPEP y sus socios.

Con información de dw