El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este martes 29 de abril que su administración apenas está comenzando a implementar cambios profundos, al cumplirse los primeros 100 días de su segundo mandato presidencial iniciado el 20 de enero de 2025.

“Solo acabamos de empezar. Aún no han visto nada. Vamos a acabar con la inmigración ilegal. Vamos a recuperar nuestros trabajos y a proteger a nuestros grandes trabajadores de la automoción y a todos nuestros trabajadores”, declaró el mandatario durante un acto celebrado en el condado de Macomb, Míchigan, en lo que constituye su primer viaje de trabajo oficial dentro del país desde su llegada al cargo.

Durante su intervención, Trump aseguró que su gabinete ha llevado a cabo “el cambio más profundo en Washington en cerca de 100 años”, con una serie de medidas orientadas a transformar la administración federal.

El presidente republicano destacó que su administración está enfocada en varios frentes prioritarios:

– Frenar lo que denominó como “adoctrinamiento” de los niños
– Recortar “miles y miles de millones de dólares en despilfarro, fraude y abuso”
– Implementar políticas migratorias más estrictas
– Proteger la industria automotriz nacional
– “Salvar el sueño americano”

“Estamos haciendo que Estados Unidos vuelva a ser grande y lo estamos haciendo rápidamente”, afirmó el mandatario utilizando una variación de su conocido lema de campaña.

En su discurso, Trump contrastó su gestión con la de gobiernos anteriores, a los que acusó de haber “vendido” el país y “desangrado” sus recursos. “No permitiremos que eso vuelva a suceder. Tuvimos cuatro años excelentes con la mejor economía de la historia de nuestro país. La bolsa subió un 88%; nos fue muy bien y ahora nos irá mejor”, señaló en referencia a su primer mandato entre 2017 y 2021.

El presidente también criticó a sus predecesores por lo que considera un enfoque equivocado en política exterior. Después de años en que otros líderes estadounidenses “enviaron su dinero para defender las fronteras de naciones extranjeras lejanas” y de que Estados Unidos luchara por otros países y no por sí mismo, “por fin hay un presidente que defiende nuestras fronteras y nuestra nación”, manifestó.

La elección del condado de Macomb como sede para este acto no fue casualidad. Esta región de Míchigan tiene una fuerte presencia de la industria automotriz estadounidense, con plantas de las tres grandes compañías: General Motors, Ford y Stellantis, que proporcionan empleo a miles de familias.

Además, Macomb representa un bastión electoral para Trump, quien ha superado por más de 10 puntos a los candidatos demócratas en las tres elecciones en las que ha participado, convirtiéndolo en un símbolo del apoyo de la clase trabajadora industrial a sus políticas económicas y comerciales.

Con información de dw