En un trágico accidente aéreo ocurrido en el noroeste de Irán, el presidente Ebrahim Raisi y otros ocho pasajeros perdieron la vida al estrellarse el helicóptero en el que viajaban. Los socorristas de la Media Luna Roja recuperaron los cuerpos el lunes por la mañana y los trasladaron a Tabriz, según informó Pirhossein Kolivand, jefe de la organización humanitaria, a la televisión estatal.
El líder supremo de Irán, Ali Khamenei, designó a Mohamad Mokhber como presidente interino, declarando cinco días de luto nacional en memoria de Raisi. “El vicepresidente primero, Mohamad Mokhber, será el presidente interino hasta que se convoquen nuevas elecciones en un plazo de 50 días”, afirmó Khamenei, asegurando así la continuidad en el liderazgo del país.
El accidente también cobró la vida del ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, lo que llevó a nombrar a Ali Bagheri, el principal negociador nuclear de Irán, como ministro de Asuntos Exteriores en funciones. Este nombramiento fue confirmado por el portavoz del gobierno, Ali Bahadori Jahromi, en la televisión estatal. Bagheri, que había servido como viceministro de Asuntos Exteriores bajo Amir-Abdollahian, asumirá temporalmente la responsabilidad de las relaciones internacionales de Irán.
La Unión Europea expresó sus condolencias por la tragedia. Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, manifestó en la red social X: “La UE expresa sus sinceras condolencias por la muerte del presidente Raisi y del ministro de Relaciones Exteriores Abdollahian, así como de otros miembros de su delegación y de la tripulación, en un accidente de helicóptero. Nuestros pensamientos están con sus familias”.
Las primeras imágenes del lugar del siniestro, ubicado en una región montañosa y con neblina, fueron capturadas por un dron y difundidas por diversas agencias de noticias y redes sociales. Estas imágenes muestran los restos del helicóptero dispersos en un área de difícil acceso, complicando las operaciones de rescate.
El gobierno iraní, en una declaración oficial, aseguró que la muerte de Raisi no detendrá el funcionamiento del país. “Aseguramos a la nación leal que el camino del servicio continuará con el espíritu incansable del ayatolá Raisi”, señaló el gabinete, subrayando que las actividades gubernamentales proseguirán sin interrupciones.
Mohammad Mokhber, de 68 años, quien fue nombrado como presidente interino, ha sido un cercano colaborador del líder supremo Khamenei y fue designado como vicepresidente primero por Raisi en agosto de 2021. Con una vasta experiencia en el gobierno, Mokhber asumirá la presidencia interina con el objetivo de mantener la estabilidad del país en este momento crítico.
La pérdida de Ebrahim Raisi supone un golpe significativo para el régimen iraní, especialmente en un momento de tensiones internacionales y desafíos internos. Raisi, quien había sido un figura central en la política iraní, deja un vacío que será difícil de llenar. La transición al liderazgo de Mokhber y Bagheri será observada de cerca tanto dentro como fuera de Irán, mientras el país se prepara para enfrentar los próximos desafíos.